Corazón de dragón

Conociendo a los bandidos

Thor suspiró, demonios esto era un caos, ladrones, Asgardiano y Midgardiano, desconfiado y prevenido, mientras el otro era voluble y descuidado, como había terminado así con ellos como doncel, miró a su amigo con pesar, pues Tony estaba callado y le ignoraba, mientras revisaba la nave y estaba con sus mil pantallas azules con números medidas y demás cosas.

-te lo he dicho, no todo lo que me pidas te vincula o ata a mí, por ejemplo puedes pedirme agua fresca, que prepare de comer o que simplemente no te moleste- dijo a Loki haciendo una seña a la forma en que estaba Steve paciente allí con Tony- no es necesario que tengas las defensas altas todo el tiempo, será agotador para ti y tu "amigo"- dijo Thor- así que adelante, eres libre de escoger tu habitación- dijo ofreciéndose a cargar las cosas.

Loki se reía suave del dragón, Él era bueno haciendo a la gente perder su paciencia, era como un talento natural- No me conoces, tengo años con las defensas altas oh, está me gusta- dijo entrando a una habitación con enormes ventana su muchas plantas en maceteros o macetas colgando- mira, no tengo nada en tu contra, Thor- dijo sentándose en la cama- de verdad... pero no quiero atarme a un lugar o a alguien, me gusta viajar de mundo en mundo, aunque tenga mi colección de problemas, los cuales seguramente no quieres a tu alrededor, además, puedo ser un fastidio, nos querrás fuera de este castillo en un par de días- dijo con total seguridad de que sucedería aunque había un destello de tristeza y autocompasión en sus ojos.

-Bueno, aquí no es necesario las tengas en alto, pero si es tu forma de ser, no hay ningún problema por ello, tu personalidad y carácter es lo que deseo conocer y no creo que deseemos eso, para ustedes un mes puede ser mucho tiempo, a nosotros es un parpadeo, apenas un suspiro, pero soy sincero Loki Odinson y deseo conocerte, mirar de nuevo ese brillo de alegría cuando ves los libros y desaparecer esa tristeza e inseguridad con la cual te refieres a ti mismo, porque sin duda eres una maravillosa persona y un digno gobernante, lo supe desde que curaste a una pequeña cría de ciervo, quien por cierto, forma parte del castillo y de mi alma- dijo dejando que un ciervo blanco entrara, casi parecía un espíritu etéreo, el animal hizo una reverencia a Thor que le dio permiso de entrar y el animal, le hizo una reverencia a Loki.

Loki miró asombrado al animal y retrocedió un poco en la cama, se sonrojo porque el dragón supo ver a través de su sarcasmo normalmente si decía ese tipo de cosas la gente se incomodaba no sabía qué decir y se alejaba; al parecer eso no iba a servir con él, miro al ciervo un momento y después se acercó, despacio, extendió su mano, ya no era niño, ya no era inocente, tenía demasiado tiempo sin tratar con espíritus de bosque o su magia, la usaba claro, pero ya no conectaba con ella a un nivel tan espiritual como antes, temía que el animal se alejara, Thor tenía razón él era un niño sensible que oraba por su pueblo, curaba ... pero ya no era ese niño, sonrió triste cuando el ciervo se acercó y lo dejó tocarlo con su magia.

-Creo que ves lo que quieres ver ... pero está bien, si quieres creer eso de mí, te dejaré hacerlo- suspiró y se sintió agotado de pronto, recordaba que tenía que hablar con Tony pero ahora solo quería tomar una siesta, no quería dormir en el enorme cuarto solo, normalmente tenía pesadillas y Tony estaba ahí para distraerlo con sus tonterías- creo... que tomaré una siesta, ya excedí mi cuota de rarezas para un día, gracias- suspiro y se metió bajo el cobertor de la cama, no le importó si Thor se iba o se quedaba... bueno, si le importaba pero no iba a admitirlo.

Thor miró al ciervo que se acercó a él y dejó que acariciara su cresta, y salió de la habitación, no quería decirle a Loki que él podía ver ese brillo de su corazón, se asustaría, podía oler su miedo y por extraño que le pareciera su tristeza y soledad, era un resonante en su cuerpo, después de todo el vínculo de un dragón y su Herjert Mitt Drage, era algo sagrado que había creado las raíces que nutrían el Yggdrasil, quizá él había considerado de joven que era una jugarreta sucia, una forma de dominar a la especie más fuerte los dragones como castigo del ataque del dragón Niöhöggr que trató de corroer las raíces del árbol sagrado, pues los Donceles y doncellas dragón les podían hacer amar la vida, pero también sucumbir a morir por su codicia y de esa forma, ellos que se consideraban aún jóvenes, se habían convertido en legendarios, él mismo había sido testigo cuando la Dragona Sif, murió a manos de un Doncel que le llevó a tratar de conquistar un reino hace al menos 500 años, sus hijos, al menos dos cayeron por doncellas dragón que pidieron su corazón, una lo apuñaló y la otra lo llevó a consumirse con la locura que le invadió y su suicidio, no, no era tan romántico como sonaba, era aterrador, y más al sentirlo en carne propia: no poder negarse a sus órdenes, no poder ignorar los sentimientos de ese ser que tendría su vida en las manos, se quedó allí en silencio meditando en qué les depararía el destino