Capítulo 6

307 24 12
                                    

Daniela poniéndose un poco más seria se separa un poco de su pecho... Y dejándose llevar se le adelanta...

Daniela: Ya sé... Lo pensaste y sabes que no debes hacer estas cosas (tocando nerviosamente su frente y su cabello, acomodando lo una y otra vez) mira yo entiendo perfectamente y sabes que? Estoy de acuerdo contigo, es que si fui una tonta... (hablando apresuradamente)

Gabriel notando su nerviosismo y que evidentemente ella no entendió lo que intentaba decir porque ni si quiera lo dejaba hablar, se le acercó y la aseguró un poco por los brazos, luego llevó una mano a su rostro y le empezó a acariciar la mejilla intentando calmarla...

Gabriel : Dani.... No, no me estoy arrepintiendo de nada... Contigo no podría...

Daniela: ¿de veras? Es que yo pensé que...

El la interrumpe...

Gabriel: No pues si ya me di cuenta que pensaste y mucho (riendo los dos) tienes una viva imaginación, deberías ser actriz

Ella se sonrió un poco y empezó a acariciar su rostro también, lo miraba como quien mira un instante feliz... Y el se perdió en esa mirada, se quedaron así por un rato... Y en esas miradas tan profundas puedo sacar el valor suficiente para hablarle...

Gabriel: Eres un sueño de mujer, te e admirado toda mi vida... Y si trabajar contigo de lejos hace unos años me emocionaba increíblemente, no te puedo explicar lo que sentí cuando me dijeron que serias tu mi pareja (Dani sonrió agradecida y se apoyo mas en su pecho) Pero cuando roce tus labios por primera vez... Te juro que fue algo mágico, tus labios son tan cálidos y hábiles (Dani lo escuchaba ilusionada) sentí tocar el cielo, mi estómago se volvió lo loco...

Daniela : Ah pues que bueno que solo tu estómago.

Gabriel abrió los ojos desmesuradamente, aún no se acostumbraba a sus formas de bromear...

Gabriel: Pues no sólo el... (arqueando una ceja)

Daniela sabía que lo había logrado y con la coquetería que la acompañaba casi desde la cuna lo miró y luego miró sus labios y sin reparo lo beso, imponiéndose entrada para explorar su boca y morder levemente sus labios... Mientras suspiraba en medio del beso.

Daniela: Tu no te alcanzada a imaginar la tormenta de emociones que llevó en mi pecho, es que te veo y todo se me despierta, hasta las perras ganas conocerte en una vida paralela, para mi eres... Un sueño, siento que me seduce hasta tu manera tan educada de tratarme... Tu complicidad cuando yo digo mis estupideces... Se que no debería, pero me gustas tanto que me sobre pasa y ya vali madres, lo sé, pero te has convertido como un imán para mi...

Ella era así, honesta, transparente cuando de sus sentimientos se trataba y con esa declaración mutua ambos sabían que ya estaba hecho, darían rienda suelta a los sentimientos, a la piel... Y que pasara lo que debía, ella no pretendía más que amar y entregarse, no quería pensar si quiera un momento en lo demás, el llevado por el deseo más irracional, quería vivir su fantasía haciéndose realidad. Pero viejo es el dicho aquel, que algo tiene de cierto, en temas del amor cuando se juega a ser traidor, el que se enamora pierde...

Y hasta ahí llegó su conversación porque ya era hora de su llamado... Así que quedaron a quedar para almorzar, las miradas no faltaban y la sonrisa sin embargo Daniela era una profesional y además toso conocían que entre ellos el juego era pesado, verde, negro y de todos los colores, así que todo lo encontraban muy normal y eso era buenísimo para la naciente "pareja"

William se comportaba prudentemente, no quería tocar el tema a menos que fuese necesario y hasta el momento no lo era...

Almorzaban entre largas pláticas sobre libros, producciones, música, viajes, arte, chistes verdes (esta sección era la Especialidad de Daniela que se coronó la reina) entre besos intensos y caricias atrevidas ambos estaban llegando a la resistencia de su abstinencia sin embargo por una cosa u otra no se le daban las cosas, sin embargo pensó que como Gabriel le había comentado no viajaría ese fin de semana a EE. UU donde vivía su familia, pues debía asistir a unos eventos con todo el elenco incluida ella y que era muy cansado devolverse en tan poco tiempo, así que ella le ofrecería quedarse esa noche en Cuernavaca donde tenía su casa, esto era realmente raro porque a Daniela no le gustaba compartir su cama, en su casa cuando estaba en un romance, sin embargo se sentía distinto, si el aceptaba podrían compartir momentos memorables y tranquilos...

Quiero amanecer con alguien.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora