it's magic! | woosan (esp.)

O4 • ¡solo amigos!

Wooyoung

Puedo ser bastante vago a veces; soy del tipo que valora la relajación y la satisfacción por encima de muchas cosas. Y con esto quiero decir que me gusta dormir mucho.

Pero, ¿por qué de repente estoy tan inquieto esta noche? Tan pronto como Hongjoong y los demás se fueron después de un par de rondas de un juego de la mafia muy caótico, no pude dormir ni un guiño desde el momento en que entré a mi habitación.

Me acosté en la cama, tal como lo estoy haciendo ahora mismo, mirando fijamente al techo mientras recordaba los eventos animados que tuvieron lugar antes de irme a dormir. Más específicamente, pensando en cierta persona.

San nunca reaccionó realmente a lo largo de las pocas películas que habíamos visto, solo respondiendo a las preguntas invasivas que Hongjoong le lanzaba de vez en cuando. Pero, tan pronto como Yunho sugirió que jugáramos a la mafia, pude ver un lado completamente nuevo de él.

Se volvió mucho más hablador y les hizo a todos una serie de preguntas mientras los observaba inquisitivamente. También fue increíblemente intuitivo y logró detectar rápidamente a la mafia oculta en la primera ronda, que resultó ser Yeosang (no era de extrañar).

También logró convencernos de que era un ciudadano normal cuando se convirtió en la mafia oculta en la segunda ronda, lo que me hace creer que es bastante bueno actuando. Lo que me asusta, pero aún así...

Dejo salir un suspiro y me doy la vuelta en la cama, hundiéndome más bajo el edredón y cerrando los ojos. Muerdo mi labio cuando la imagen de la sonrisa triunfante de San después de haber ganado esa ronda de Mafia destella detrás de mis párpados. En ese momento, se veía tan feliz que sus ojos brillaban, y fue entonces cuando me di cuenta de que tal vez ... tal vez las miradas puedan ser engañosas después de todo.

Mis cejas se arrugan mientras dejo escapar un gemido molesto. Deja de pensar en San, mi mente me gruñe y lo intento. Créanme, lo intento mucho, pero de alguna manera la amplia sonrisa del vampiro no quiere salir de mi cabeza.

Un sonido agudo corta el aire, rompiendo el previo silencio en la habitación. En un segundo me pongo alerta y me incorporo hasta estar sentado.

¿Qué fue eso?

Parecía que algo se había caído y probablemente se había roto, considerando lo repentino que fue.

Me quedo quieto unos segundos más con la respiración contenida, sintiéndome un poco aprensivo, y ahí es cuando mis oídos captan el distante murmullo de palabras que no puedo descifrar. La voz suena familiar. Suena como... ¿San?

En un instante, me levanto, decidiendo ignorar mis pantuflas mientras salgo descalzo por la puerta.

El suelo está frío contra las plantas de mis pies, pero lo ignoro mientras continúo caminando hacia la habitación principal.

Mierda, pienso tan pronto como entro en la sala de estar. Está completamente oscuro aquí, salvo por la mínima luz que proviene de los otros dormitorios a un par de metros de aquí. Miro a mi alrededor, tratando de ajustar mis ojos a la oscuridad hasta que logran discernir algo en la cocina.

Dejo escapar un suspiro de consternación cuando veo un frasco roto en el piso de la cocina, pero esa sensación es breve cuando escucho las exhalaciones rígidas y agudas que vienen de la sala de estar.