🌸𝓞𝓻𝓸𝓬𝓱𝓲𝓶𝓪𝓻𝓾 𝓪𝓷𝓭 𝓽𝓱𝓮 𝓢𝓪𝓴𝓾𝓻𝓪 𝓯𝓵𝓸𝔀𝓮𝓻 🌸

🌸𝒱𝒶𝒿𝒶𝓃𝒹ℴ 𝒸ℴ𝓃 𝓅𝒶𝓅𝒶🌸

Muy temprano en la mañana, se podía apreciar a un pelinegro ir de un lado a otro, sellando cosas en pergaminos y alistando lo que iba a necesitar en el camino, desde armas hasta un poco de comida, y no para él, más bien para una pequeña de tres años, la cual le llama papá.

Aún no despierta... - era verdad, eran las siete de la mañana y la pequeña no había ni salido de su habitación para ir al baño, cosa que solía hacer a dicha hora, se acercó a la puerta del cuarto, la cual era inconfundible, la única puerta rosa con dibujos de crayones en ella, siempre miraba los dibujos antes de entrar, un dibujo deforme de el, Kabuto y Sakura tomados de la mano, con un cielo azul y un arcoiris detrás, un árbol con un columpio donde ella solía jugar, y muchos corazones que adornaban el cielo, la palabra "Familia" era lo que más había llamado la atención del Shinobi.

Papá, ¡mira lo que dibujé!- una pequeña de dos años y tres meses jalaba a su padre del pantalón, lo llevó a rastras a dónde la puerta de su cuarto y le mostró su nueva creación.

¿Rayaste la puerta?- iba a seguir con su regaño, cuando notó el dibujo, y la frase "Amo a mi familia" en la puerta, "familia", es verdad que Sakura era como su familia, era una pequeña que se estaba ganando su cariño, o bueno, el se negaba a creerlo, pero así son las cosas.

¿Te gusta mi dibujo?- ella estaba llena de pintura y crayón, se notaba su cara de felicidad y esa sonrisita que lo derretía, no encontraba manera de decirle que no debía rayar las paredes o las puertas.

No debes de rayar las cosas Sakura, eso está mal, señor Orochimaru se va a enojar contigo si lo haces- Era Kabuto que llegaba a ver el escándalo de la niña, seguro Orochimaru lo mataba por descuidar a la niña y permitir que hiciera esos rayones a la puerta.

Kabuto, a papá le gusta mucho mi pintura, ¿Verdad que sí papá?- no encontraba manera, así que optó por agacharse a la altura de la pequeña y mirarla de forma seria.

Sakura,no debes de rayar las paredes de la base, aún así... te quedó bien...te traeré hojas para que puedas dibujar, la próxima vez, la pared o la puerta no debe rayarse, puedes dejar tu dibujo en ella-

¡Hai!-

Orochimaru tocaba de forma delicada el dibujo, aún no superaba lo que Sakura le había dicho la noche anterior, no había dejado de pensar en ello toda la noche.

Sakura, despierta, debemos irnos- tocaba la puerta para tratar de despertar a Sakura, pero esto no daba frutos, por lo que después de unos cuantos minutos, su mejor idea fue entrar a la habitación de la niña y ver a una nena dormida en la alfombra de su habitación, con media sábana en el suelo y la otra mitad aún en la cama.

A paso lento pero seguro se acercó a la niña y la movió un poco para al fin hacerle despertar, talló sus ojitos con sus puños para sacarse el sueño.

Buenos días papá...- miraba a Orochimaru aún estando sentada en el suelo, estaba adolorida por dormir en ese lugar, pero no había notado que se había caído de la cama.

Debemos irnos Sakura, ayer te dije que alistaras tus cosas, ¿Dónde están?- ella señaló una silla, donde se encontraba únicamente su ropa, no había alistado nada más que eso, esto iba a ser pesado.

¿Es todo lo que empacaste?, No importa, de todos modos, tengo que hablar contigo de algo importante- ella alzó los brazos en busca de que él la ayudara a parar, fue grande su sorpresa al ver cómo él la alzaba en brazos y la cargaba, hacía tiempo que su papá no la cargaba, así que aprovechó para jugar con su negro y largo cabello.

¿Cuál es la cosa impoltante?...- aún estaba algo adormilada, por lo que se le escapó un pequeño bostezo a la hora de preguntar.

Se dice importante, con "o" y "r", la cosa es, Sakura, iremos a uno de los laboratorios más importantes que tengo, y en ese lugar hay cosas que tú no debes de tocar, ¿Entiendes eso? No toques nada, y tampoco te alejes de mí cuando lleguemos a la aldea, no quiero repetir esto, por lo que espero entiendas-