Apretó los puños. Su sangre hervía y su magia exigía ser liberada.
Eso lo guardaría para su hermana.
Por otro lado, su corazón latía con fervor, más expuesto que nunca.
Eso era para Ezra. Porque iría por él hasta el fin del mundo.
Iría al Bosque de las Ánimas y jamás se había sentido tan seguro de algo en su vida. Eso le hizo pensar en la posibilidad de que Ezra tuviera razón. Tal vez sólo era cuestión de elegir. El amor lo podía hacer vulnerable, pero también lo podía hacer fuerte. ¿Y ahora mismo? Se sentía más fuerte que nunca.Bastian, pág 296
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Frases de "La ladrona de la luna"- Claudia Ramírez Lomelí
FantasyFrases y diálogos de "La ladrona de la luna" ⚠CONTIENE SPOILERS⚠