Es una condena, es una condena amar y no ser amada.
Es una condena, amar y ser lastimada.
Es una condena, abrir tu corazón para que te lo rompan en mil pedazos.
Es una condena, pasar de sonreír cada noche por alguien a llorar cada noche por ese mismo alguien.
¿Cómo el tiempo pasó tan rápido? ¿Cómo pase de sentir amor a sentir dolor, por la misma persona que me prometió la luna y las estrellas?
Y es que siempre es lo mismo, la historia se repite una y otra vez. Conozco a una persona que me hace sentir felicidad y amor, vivo momentos increíbles con esa persona, y de un día a otro, mi corazón termina rompiéndose. Luego, vuelvo a conocer a alguien más, con miedo a que vuelvan a romperme el corazón, decido perder el miedo y es ahí cuando la historia se repite.
Estoy condenada, a amar, a vivir por amor; y morir por amor.
No me queda más que limpiarme las lágrimas, y cargar con mi eterna condena.
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¿Por qué la vida es cómo una cama?
CasualeNo, no estoy drogada. Esto se me ocurrió cuando estaba tendiendo mi cama, es una pequeña analogía. También habrán mas analogías o reflexiones cada vez que necesite desahogarme. Totalmente original, derechos reservados.