El chico Ferrari | Charles Leclerc

Buenos días princesa

Dejé todo en el sillón y me fui a duchar y preparar ya que no quería hacerle esperar ni mucho menos. Al salir de la ducha, me maquillé, me puse las lentillas y me vestí. Había decidido ponerme unos pantalones chinos negros, un top negro lencero y una americana roja con unos tacones negros. Cuando mire la hora note que me quedaban todavía 10 minutos por lo que coloque las cosas de mi maleta y al terminar note como llamaban a la puerta y al abrir ahí estaba el. Con unos pantalones color crema, una camisa blanca y nos zapatos negros, al verme me miro de pies a cabeza y lo primero que me dijo fue

- Estás preciosa – dijo sonriéndome – ¿vamos? – dijo sin apartar la mirada de mis ojos

- Tu tampoco te quedas atrás Charles – dije cerrando la puerta – vamos que a mi padre no le gusta esperar jaja – dije empezando a andar en dirección al ascensor

- No se diga más señorita Binotto – dijo soltando una risa al acabar de hablar.

Fuimos a su coche, el abrió mi puerta para luego irse a su sitio como piloto; no tardamos mucho en llegar al restaurante donde estaba esperándonos mi padre en la entrada, el cual al vernos sonrío.

- Hola papa – dije abrazándole

- Hola princesa – dije devolviéndome el abrazo – buenas noches, Charles – dijo mirando al chico

- Buenas noches, Mattias – dijo sonriente

- Bueno niños vamos dentro que creo que todos tenemos hambre – dijo abriendo la puerta del restaurante.

La cena transcurrió con normalidad, de vez en cuando me sentía observada, pero era algo a lo que tendría que empezar a acostumbrarme. Al terminar de cenar nos despedimos de mi padre ya que él debía estar mañana temprano en el circuito para arreglar un par de asuntos, me dijo que mañana me dejaría un coche en el parking para que pudiera moverme si me fuera necesario lo cual agradecí bastante. Charles y yo fuimos a su coche pensando que íbamos a ir al hotel, hasta que me dijo

- ¿Oye te gusta el helado? – dijo apartando la mirada de la carretera para mirarme un momento

- Si claro que me gusta, ¿Por qué preguntas? – dije mirándole

- Entonces creo que te va a gustar a donde te llevare – dijo tomando un desvío en dirección a la ¿playa? En cuestión de 5 minutos aparco el coche y me abrió la puerta – he pensado que podríamos ir a por un helado y dar una vuelta por el paseo por la orilla – dijo mirándome sonriente como si fuera un niño pequeño emocionado

- Me encanta la idea – dije abrazándole – sabes de alguna heladería – le miré curiosa, pero sin quitar la sonrisa que tenía en aquel momento

- Si, asique señorita Binotto me acompañas – dijo tendiéndome la mano

- Si vamos – dije mientras agarraba su mano

Fuimos a una heladería italiana que había enfrente de la playa, yo me pedí uno de vainilla y el uno de chocolate y nos fuimos en dirección a la orilla no sin antes descalzarnos. Estuvimos hablando de todo un poco, por así decirlo nos estábamos conociendo, cuando vimos la hora que era decidimos ir al hotel ya que a la mañana siguiente teníamos que madrugar y eran las 12 de la noche. Una vez habíamos llegado me acompaño a mi puerta para despedirnos.

- Espero que lo hayas pasado bien Stella – dijo mientras se apoyaba en el marco de la puerta

- No lo dudes Charles me lo he pasado muy bien para ser sinceros – dije sonriéndole – ¿mañana nos vemos en el circuito?

- Si allí nos vemos – dijo sonriéndome

- Entonces perfecto – dije mientas bostezaba

- Te voy a dejar descansar que tienes cara de tener ganas de irte a dormir – dijo abrazándome

- Vale Charles mañana nos vemos, descansa que mañana empezamos a tope – dije al separarme de él – buenas noches Charles – dije sonriéndole mientras abría la puerta de mi habitación

- Buenas noches pequeña – dijo sonriéndome antes de irse.

Al entrar me puse a analizar lo que acababa de suceder esa noche, decidí no darle más vueltas, mañana reuniría a las chicas y a Seb para contarles todo. Me desmaquille, me lave los dientes, me puse mi "pijama" digo eso porque es una camiseta larga de Star Wars que tenía hace años y me fui a dormir directa.

A la mañana siguiente de desperté por mi alarma, me recogí el pelo en un moño, me puse mis gafas y me vestí. Me puse la camisa del equipo y cogí una de las chaquetas que había por si tuviera frio. Prepare mi mochila y me fui al parking donde había un precioso Ferrari Portofino color rojo, deje las en el lugar del copiloto y fui al circuito. Al aparcar y entrar me fui directa a desayunar y para mi sorpresa estaba mi padre con Seb desayunando asique aproveche y me acerque.

- Buenos días – dije sonriente y abrazando a ambos

- Buenos días princesa, ¿cómo has dormido? – dijo mientras tomaba su café

- He dormido bien la verdad – dije mientras volvía de coger una cucharilla para mi café – ¿tú que tal has dormido papa?

- He dormido bien pensando que en esta Scuderia ganara este año el mundial – dijo sonriente

- Ya has oído Seb – le dije al alemán

- También va por ti que te recuerdo que eres la ingeniera de pista de cierta persona – dijo mirándome de una manera picara

- ¿Me he perdido algo pequeña? – dijo mi padre algo serio

- No papa no ha pasado nada entre Charles y yo – dije algo nerviosa pensando en lo de anoche

- Todavía no pero poco queda – susurro el alemán a lo que le di una patada y di gracias que mi padre estuviera hablando con un mecánico

- Bueno chicos les dejo que tengo que ir a arreglar un par de asunto – dijo dejándome un beso en la cabeza y saliendo – por cierto, a las 11 os quiero a todos en el box que tenemos que preparar esta gran temporada – dijo saliendo finalmente.

- Mira he estado a punto de tirarte el café encima Sebastian, tengo que hablar contigo y con las chicas luego asique no te escapes – dije acabándome el café

- No sé porque intuyo que tiene que ver con el pequeño Charles – dijo mirándome serio

- Intuyes bien la verdad – dije sonrojándome

- Me vas a dar la razón a lo que te había dicho – dijo el alemán mirando alrededor nuestra

- No te voy a decir hasta que estemos todos y hablemos – dije levantándome y cogiendo mi móvil – vamos al box mi padre debe estar por empezar la reunión.

Y así fue llegamos justamente cuando mi padre estaba entrando al box, una vez dentro nos fuimos donde se encontraba Charles y mi padre comenzó a hablar. Al finalizar acabo con un forza Ferrari.