Vivo en estas cuatro paredes con rejas,
Soy prisionero de mi mismo y de este en cierro.
Yo me arrastré a este agujero,
Ya no volveré a ver la luz del sol mientras camino a por el pan,
No le daré los buenos días a mi hija,
No le contaré sus cuentos,
No volveré a estrecharla entre mis brazos y decirle cuanto la quiero.
Yo me metí aquí y debo de asumir las consecuencias.
Pero duelen, duelen esas consecuencias,
Mi mayor dolor es mi hija,
Por mi culpa ella crecerá sin su papá,
Intento ser mejor persona aquí adentro, para que ella este orgullosa de mi,
Más nunca lo estará, por que estaré aquí hasta el fin de mis días.
No podré llevarla al altar,
Darle sonrisas y abrazos.
Perdí lo mejor de mi vida, mi hija, y todo por esta prisión en la que he entrado,
Por mis culpas, errores y delitos cometidos.
Sin antes a ver velado no solo por mi futuro, si no por el del mi princesa.
Crecerá sin papá y yo no podré perdonármelo jamás.