Chico De Cristal |Hyunlix|

cinq

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Algunas lágrimas avían logrado salir pero el frío clima que chocaba contras su rostro las hacia desaparecer.
Corrió hasta que sus pies dolieron y su condición física lo obligó a parar y tomar un descanso.

En esos minutos en los que había estado sentado en una parada de autobús muchos sentimientos aparecieron a la ves, se sentía impotente, enojado, triste y sobre todos se sentía solo.

No sabía a donde ir, volver no era una opción. Si se enteraban de lo que había echo lo mantendrían más vigilado, hasta llegarían a poner barrotes en su ventana. Definitivamente volver no era una opción.

Nesecitava un milagro si quería sobrevivir a las peligrosa calles, según su reloj eran las 03:00 de la madrugada, buscó su móvil pero no había rastro de el.. nada podría empeorar.

minutos después el sueño se hizo presente, pero no se podía dar el lujo de dormir y sin perder más el tiempo volvió a caminar hacia ninguna dirección en específica.

Solamente camino y camino....

Perdido en sus pensamientos sintió algo impactarse contra el, haciéndolo caer contra el frío suelo y cuando impacto contra este, perdió el conocimiento quedando tendido en aquel lugar.

°°
-¡No otra vez!- dirigió su mirada hacia el chico que estaba tendido en el pavimento y antes de hacer algún movimiento dirigió la mirada hacia el callejón de dónde avía salido.
-Todavía tengo tiempo-

Lo agarro entre brazos cargándolo mientras escapaba de la policía, corrió entre los callejones escabullendose y logrando ser perdido por los oficiales.

Suspiro mientras dirigía la mirada a el chico que se encontraba desmayado sobre sus brazos y sonrió, parecía un bebé. -Normalmente ya despiertan- hablo recordando sus anteriores accidentes. ¿Que debería hacer en esta situación? Si lo abandonaba en ese lugar le podía pasar algo grabé y si lo llevaba al hospital podía ser reconocido por alguno de los policías que rondaban el lugar.

No podía arriesgarse a ser arrestado nuevamente. Minho lo mataría, pero no tenía más opciones a menos qué.. ¿Y si lo llevaba con el?, El rubio no parecía que iba a despertar pronto y no tenía un aspecto peligroso.

Ladeó la cabeza un par de veces y aún con un poco de confusión emprendió camino hacia su hogar.
-Solamente será hasta que se despierte, tengo que asegurarme que este bien- repitió esas palabras un par de veces para autoconvencerse, podría ser un ladrón pero nunca un asesino y estaba muy seguro de eso.

En la trayectoria el chico entré sus brazos no le había causado problemas, era tan liviano como una pluma y creyó en un momento sentir como el peli rubio se acurrucaba más contra su cuerpo en busca de mayor comodidad, pero seguramente solo fue su imaginación.

Después de 40 minutos de caminata llegó a el edificio al cual entro por la puerta trasera, dirigiéndose derecho al sótano.
Cruzó por la sala y cuando estuvo a punto de poner un pie en su habitación, escucho un gruñido proveniente de su espalda.

-Eeh ya me voy a dormir, buenas noches- sin darse la vuelta, se despidió con intenciones de seguir con su camino.

-Hwang Hyunjin- tal cual una madre regañando a su hijo -¿Porque tardaste tanto?- su voz se escuchaba mas seria de lo normal y sabía que tendría que contarle todo antes de que se enfadé más.

Dio media vuelta dejando ver al rubio entre sus brazos, la cara del peli naranja hablaban por si sola.
-¡Otra vez! Te dije que tengas más cuidado, No debes chocar a las personas y menos dejarlas inconcientes, sabes que este tipo de problemas afectan el rendimiento del plan. Y tienes más posibilidades de ser atrapado.

-¿A caso no te enseñe bien?-suspiro frustrado-¿Quien es el?- pregunto con un semblante serio.

El peli negro acomodo al chico entre sus brazos mientras dirigía su vista al mayor.
-No lo se- bajo la mirada- solamente se que no despierta y no quería dejarlo tirado en el medio de la calle.

Levantó la mirada, rogándole a Minho para no ser castigado.
-Deja que se quede hasta que despierte¿Si?- mostrando sus dotes de ternura logro que el peli naranja aceptará, pero con una condición.

-Ese chico queda bajo tu responsabilidad y por ninguna razón debe afectar el plan ¿Entendido?- al terminar de pronunciar su única condición el peli negro acepto sin dudarlo.
Y extendió la mochila que se encontraba en su espalda.

-Aqui se encuentra todo el dinero que me tocaba robar, asegúrate que los demás hayan cumplido con su parte- sonrió en dirección a minho, antes de dar media vuelta y entrar por la puerta.

-Cuando estén listos empezamos con el plan- y abandono el lugar para adentrarse en su habitación.