Un niño de ocho años debía hacer un examen final. Estaba tan nervioso que justo antes de pasar al frente de orinó en sus pantalones. Con angustia vio como algunas gotas caían al piso. Al levantar su vista, observo que la profesora lo estaba llamando. ¿Que hacer? ¿Cómo moverse sin dejar al descubierto su situación? La profesora al notar, al notar que se negaba a obedecer le, se dirigió hacia su pupitre. El niño entro en pánico, pues ahora quedaría en ridículo frente a sus compañeros y se reirian de el.
En ese momento, una compañera de clase camino por el pasillo con una pecera en las manos. Al pasar frente a el, tropezó y derramo el agua sobre su ropa, empapándolo de la cabeza a los pies. La maestra tomo al niño de la mano y lo llevo al baño para ayudarlo a secar. El chico sintió que había Sido muy afortunado pues se había dado cuenta del accidente que había tenido. Cuando entró de nuevo al salón y para ocultar aún más lo sucedido, le gritó a la niña desde la puerta: "¿Oye, es que no sabes por dónde caminas, tonta?"
Durante el recreo nadie quiso jugar con ella. Al terminar las clases de fue caminando sola para su casa pero el niño la alcanzó y le pregunto:
-¿Realmente fue un accidente?
Ella lo miro y le dijo:
- Pues yo estaba detrás y ví que te tomaste y que la profesora venía; por eso corrí y cogí la pecera para fingir que me tropezaba, por qué no quería que nadie se burlara de ti y que te sintieras humillado.
El niño se quedó sin palabras, asombrado por lo que acababa de escuchar.
Desde entonces no ha podido olvidar lo sucedido.
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La Culpa Es De La Vaca Para Niños.
PoesiaUn libro muy bonito que deja muchas reflexiones para leer cuando estés aburrido y de viaje.