¿Qué pasaría si en NCT hubieran metido a una chica? ¿Y si formase parte de la sub-unidad china WayV?
~Subiré tanto reacciones como historia~
~Por ahora los pedidos están cerrados, pero avisaré cuando los abra~
– Deberías empezar a comportarte como alguien de tu edad! – Habló! El Maduro del grupo, vamos John no me jodas, hago y digo lo que me da la gana. Y dudo mucho que por hacer lo que hice se arme tanto drama. – Estás rodeada de chicas que son capaces hasta de golpearte, realmente crees que se van a quedar quietas por haberte visto de la mano de Yuta!? – En eso tiene razón –dijo Doie desde el sofá– pero también es cierto que no debería ser así... Tener a esas obsesivas detrás es una tortura. – Lo vuestro terminó hace tres años, así que no se tomen de la mano, no se miren, no se hablen, no se comuniquen. Puede costarte a tí la permanencia en WayV, y a él en 127. – Y por qué no se lo dices a él también? Por qué los gritos son siempre a mí? Por qué quedo yo como la desesperada qué va siempre atrás de Nakamoto? – Porque lo eres, estás deseando que te vuelva a fo –ni siquiera le dejaste terminar, a gusto te quedaste girándole la cara de una bofetada– estás loca! – Eres un completo bastardo John Suh –ibas a volver a golpearle pero Doyoung y Haechan se levantaron del sofá para frenarte– no vuelvas a denigrarme de tal manera en lo que te queda de vida. – Esto se nos fue de las manos completamente –dijo Taeyong, el cual estaba apoyado contra la pared viendo el drama– Hyuck ve arriba, diles a Taeil y Yuta que bajen. Y no vuelvas a bajar hasta que te avise. – Pero yo quiero quedarme con noona. – Hae, sube, voy a estar bien, te lo prometo –le dijiste mientras apretabas levemente su manito–.
Cinco minutos después un Nakamoto furioso entraba al apartamento seguido de un Taeil nervioso.
– Que alguien le detenga, va directo a Johnny!! – Alto ahí, aquí nadie más le pega a nadie -dijo Taeyong sosteniendo a Yuta de los hombros–. – Un golpe más, uno menos... Me da igual la verdad. – Pues encantada te doy otra hostia –soltaste en español mientras te contenías en el sofá–. – A ver, por lo que entendí... Mimi y Yuta bajaron del coche de la mano, pero no iban solos, iban con Ten y Johnny –los tres asentisteis– y en pocos segundos Mimi vio el fallo y dio la mano también a Ten. Además ibais con dos trabajadores más de la empresa. – Exacto, por eso digo que no creo que sea para tanto. – Johnny lo está exagerando todo, como . siempre –dijo Taeil saliendo de la cocina con una bolsa de frituras–. – En realidad está siendo sensato –soltó Doie–. – A ver, si dicen algo es fácil salir del aprieto. Mimi trabaja con WayV, y estuvo con nosotros desde 2014, decimos que es uno más y ya está. – Yuta, tampoco es tan fácil –dijo Taeyong– pero sí que se puede encontrar solución. – Entonces me puedo ir ya a mi apartamento? Iba a hacer maratón de un dorama con Sicheng y Dejun, y llego tarde. – Puedes irte, pero lo mejor es que en un par de semanas no los vean juntos a vosotros dos –dice el líder señalando a Yuta– al menos dos semanas, dentro del edificio podéis hacer lo que queráis, fuera no. – TAEYONG!! –le recrimina Johnny– Ni dentro ni fuera! – Me voy antes de pegarle de nuevo, adiós chicos.
Y así saliste de aquel apartamento mientras escuchabas que los chicos seguían peleando. En parte estabas harta de los comentarios que te dedicaban algunos miembros de NCT y WayV respecto a lo que sucedía con Yuta, pero no lo podían evitar, se seguían gustando y eso daría problemas a la larga o a la corta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.