Capítulo 2: Conociendo a Nº17

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No podía creer lo que mis ojos veían, de todas las personas que pensaba encontrarme, él era la última. Seguía igual que hace 8 años, bueno imagino que al ser un androide su capacidad de envejecer es mucho más lenta. No hice ningún indicio de atacarle, si ha pasado todo este tiempo y no ha hecho nada malo, no había necesidad de iniciar una pelea.

-¿Qué haces aquí, 17?.- La verdad estaba un poco confundida, no sabía por qué estaba él solo en una isla habitada solamente por animales, un tanto extraños he de decir.

-Eso debería de preguntártelo yo, estás en una reserva natural protegida.- Lo miré sorprendida, eso explicaba que no hubiera más que bichos extraños por los alrededores. Me fije en su brazo izquierdo, llevaba el símbolo de los Ranger, así que ha esto se ha estado dedicando todos estos años.

-No sabía que era una reserva, me disculpo entonces.- Tenía muchas ganas de hacerle preguntas a cerca de su vida, por lo que sabía tenía contacto con número 18, pero muy de vez en cuando y tampoco es que ella fuera muy abierta respecto a su vida como para contar la de su hermano, pero aunque tuviera curiosidad no me parecía correcto preguntarle nada.

-Y dime, ¿Qué haces aquí?, no creo que ahora te dediques a ser una cazadora furtiva así que, ¿No deberías de estar con tu familia?.- No esperaba que él fuera el primero en preguntar, mucho mejor para mí, no me molestaba para nada responderle las preguntas que tuviera que hacer, y así me daría pie a saber un poco acerca de su vida y entrar en confianza.

-Pues verás, creo que ha llegado el momento en el que siga mi vida alejada un poco de mi familia, y también entrenar por mi cuenta. La verdad es que me despisté y sin fijarme a donde iba acabé en esta isla. Y dime 17, ¿Has estado todos estos años en esta isla?- Me pareció correcto contarle el motivo de como acabé aquí, al fin y al cabo la intrusa aquí soy yo.

-Ya veo, no...- No pudo acabar lo que iba a decir ya que empezamos a escuchar un ruido muy fuerte, como si varios coches se aproximaran. A lo lejos pude observar como se acercaban unos 15 tanques.

-¿Quiénes son ellos?.- La verdad estaba un poco confundida, imagino que serán los cazadores furtivos con los que me comparó antes.

-Cazadores furtivos.- Me dijo mientras ponía una mano en su cintura, se le veía muy despreocupado la cual cosa no me extrañaba, él era un ser con muchísima fuerza en el pasado, seguro que ahora tenía más poder, unos simples humanos no le iban a causar problemas.

-¿Vas a acabar con ellos?.- Si era así no me importaría echarle una mano, un calentamiento no me vendría mal.

-De echo ese es mi trabajo, pero puedes ayudarme.- Mientras me decía eso, empezamos a elevarnos preparándonos para atacar.

-Lo haré encantada- Estaba emocionada por ver a número 17 en acción, aunque fuera contra unos simples humanos, esto me iba a traer muchos recuerdos. Sin más estaba lista para atacar pero su voz me frenó.

-Ten cuidado con los animales, no los lastimes. Ah y no te vayas a exceder y termines matándolos- Esto último lo dijo refiriéndose a los cazadores.

-Tranquilo, 17. Confía en mí.- Sin más que decir nos lanzamos sobre los cazadores para evitar que se lleven a los animales.

Los cazadores que estaban dentro de los tanques nos empezaron a disparar, como era de esperarse ninguna bomba nos dio, 17 sin mas tiempo que perder le dio una patada al primer tanque haciéndolo explotar. Yo por mi parte lo imité, pero en vez de darle una patada use mis dos piernas consiguiendo que explotara el segundo tanque. Las dos explosiones que habíamos provocado 17 y yo hicieron que los demás tanques explotaran, eso me recordó a las fichas de dominó, cuando cae la primera ficha derribando a las demás. La verdad fue demasiado sencillo, ni para calentar me sirvió, después de las explosiones los cazadores estaban desmayados y solo quedaba uno consciente, al cual 17 se acercó.

Desafiando las normas (Whis x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora