Menos mal que estabamos en vacaciones y me podia dar el gusto de descansar hasta casi el medio dia. Mi hermano, Steeve, habia dejado la puerta de mi habitacion abierta antes de irse a trabajar. Cálculo que seran cerca de la una del mediodía. Me dejo caer boca abajo sobre la cama. El edredón y las mantas se enredan en mi cuerpo. Los cascabeles se escuchan por el pasillo. Tara, mi perra. Un perro de raza desconocida de pelo largo y poco tamaño lleva con nosotros dos años. Bueno conmigo, un capricho desde siempre.
-Tara.- Golpeo las mantas de mi lado y ella con su salto me acompaña en la cama.
Como es su costumbre primero da saltos a mi lado y luego se tumba para que la acaricie.
En ese momento en el cual me quedo fija mirando en un punto perdido de mi cuarto y con mi mano izquierda acariciando a Tara siento un cosquilleo en mi estomago que mas tarde se traspasa a mi espalda y poco a poco recorre todo mi cuerpo. Un señal, como si algo suficientemente especial fuera a ocurrir hoy.
La puerta de la entrada se abre y Tara me deja tirada en la cama. Va a saludar a mamá. Aunque hace frio y si soy muy perezosa a veces, decido levantarme de la cama. Cogo el movil y me envuelvo en mi bata. En camino a las escaleras leo alguno de los whatsap y mientras bajo dejo que algunos tweets se carguen.
-¿Mama?
Entonces veo como Tara esta sentada en la puerta de la cocina. Dejo las escaleras atras y voy a la cocina, me apoyo en el marco de la puerta.
-Buenos días.
- Ya era hora, ¿no crees Triz?
- No me acabo de levantar, llevo desde las doce.- Algo no muy convincente cuando lo dices bostezando y mientras te estiras disimuladamente.
Triz es como me habian decidido llamar, claro que no es mi nombre completo, me llamo Beatrice y al haber cumplido la mayoria de edad mi madre habia decidido que Bea de habia quedado un poco infantil y mi hermano habia tenido la idea de llamarme Triz, en menos de una semana amigos y familiares ya me llamaban asi. Y la verdad es que me gustaba al menos ya no me llaman "Bea la fea" o "yo soy Bea". Esta ultima frase venia de una serie de hace bastantes años.
-Ya bueno.- Abrió el cajón y me tiro el mantel- Vamos pon la mesa.Mamá limpiaba los platos y yo terminaba de poner a Tara la correa para ir a pasear. Me gustaba mi barrio. Era una urbanización de chalets cercana a una parque pequeño entorno a un lago artificial. Cuando saco a Tara suelo dar la misma vuelta de manzana sobre las mismas calles. Aun que era 29 de diciembre el sol daba sobre la ciudad. Ni hacia calor pero tampoco hacia mucho frío
Al estar de vuelta subí a mi cuarto, las puertas del salón estaban cerradas mamá seguro que estaba echandose la siesta en el sillón, aunque según ella veía las telenovelas. Mi móvil seguia donde le había dejado, sobre la mesa de mi estudio. Tara se tumbo sobre la cama, que seguían como la había dejado hace pocas horas, sin hacer. Quise espantar a Tara de mi cama pero me miraba pidiendome solos unos minutos mas, eran tan yo algunas mañanas que me mataba por dentro. Así que me tumbe a su lado. Las vacaciones de navidad se estaban acabando, el año también se estaba acabando. Podría decir que 2014 había sido un buen año, pero faltaba ese algo para llamarlo perfecto. Cerre los ojos, y momento por momento se fueron retrasmitiendo sobre mis parpados cerrados, el 2014 había dejado de ser un año y se reproducía como una pelicula. El sonido de un whatsapp hizo que dejara de pensar en los buenos y en los malos momentos del 2014. ¿Era posible echar de menos algo que aun no había acabado?
Para mi sorpresa mi grupo de amigos, o supuestos amigos se acordaban de mi visperas de fin de año, querían que me fuera con ellos aun que había un motivo, que le saldrian mas barato cuantos mas fueramos. La cosa esta como siempre, me querían solo para hacer vulto, para ser numero, no me querían porque me echaran de menos. No sabía porque seguía refieriendome a ellos como mi grupo de amigos o algo, ni siquiera sabía porque seguía contando con ellos. Pero tras caer una vez caía otra y otras cuantas mas y si, siempre seguidas. Asi que esta vez no fue menos y conteste que contarán conmigo. Debía de ser positiva, intentar pensar en que me lo pasaría bien, disfrutar, iba a ser mi primera fiesta de fin de año en la cual seria mayor de edad. Sería una fiesta aquí en la ciudad. Baje las escaleras y entre en el salón, mamá veía supuestamente la novela, aun que estaba con los ojos cerrados y arropada a su manta.
- Mamá.- Pronuncie sin apenas aliento.
- Mmm
- Me voy de compras.
- ¿Qué?.- Palabra mágica que hace que tu madre se despierte.- ¿Cómo?
- No, nada, me han invitado a ir a una fiesta el día de año nuevo, y quiero ir de compras, no tengo nada.- Me apoye sobre el respaldo del sillón.
- ¿Que no tienes nada?.- Bostezo.- ¿Quieres que mire yo por ti en tu armario?
- Mamá es una fiesta de año nuevo, ya sabes... Aquí, todas iran con vestidos nuevos, ropa nueva...
- Vale, vale. Llama a alguna de tus amigas y vete a comprar.
- Te quiero.- Me incline sobre el resplado del sillón para darla un beso en la frente.
Entusiasmada subi los escalones de dos en dos, Melany sería la compañera perfecta para ir de compras pero ella no estaba en la ciudad, ella y su familia se habían ido para pasar navidades y año nuevo con su familia en el pueblo, lo mas normal, mi familia normalmente también es así pero este año los trabajos de mis padres y también de mi hermano no nos permitían irnos al pueblo, asi que habiamos pasado nochebuena los cuatro juntos y nochevieja todos nos iriamos de fiesta despues de cenar los cuatro, claro. Mi otra opción fue Allysa, mi otra gran mejor amiga, y como era de esperar, no dijo que no. No se sabía a quien de las dos nos gustaba más las compras, si a ella o a mi.
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Holaaa :)
Bueno es el primer capitulo y el primer comentario. Con el tiempo dejare de poner comentarios supongo, pero quería daros las gracias por leer, se que este primer capitulo no es muy bueno, pero hasta que no se desarrolle un poco mas la trama pues va a ser un poco sosillo esto.
Os quería pedir que comentéis y que sobretodo darme vuestra opinión al respecto. Es muy importante para mi saber que pensáis tanto las cosas buenas como las malas. Eso sí no pongais palabras necesias, respectemonos todos y la vida sera mas bonita. Bueno no quería un comentario extenso y me estoy enredando.
Dejar comentarios, me gusta y si podéis compartir.
Intentaré subir un capitulo semanal si mis amados estudios me dejan.
Nos leemos.
Besitos xx
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Siete años.
Romance¿Caprichos del destino? Si. A veces nos olvidamos que somos solo personas que giran al son de la Tierra. Que a veces tenemos demasiadas cosas en nuestra mente que se nos olvida que tenemos un destino y hasta que llegamos a el pasamos un periodo llam...