9.

94 10 3
                                    

| De ahora en más los capítulos serán algo cortos (incluyendo éste). Gracias por leer.|

Dos días antes de Navidad;

Estos días hubo mucha  incomodidad entre Jeno y yo la cual no pensé que aparecería.

—Chicos ya que ustedes se levantaron antes ¿Por qué no me hacen un favor? —Preguntó mi mamá.

— ¿Qué necesita señora? —Preguntó Jeno.

— Quería pedirles si podían comprar las cosas para navidad, hay muchas cosas que faltan.

— Ah ¿Tiene una lista?

— Sí.

— Deme y le voy a comprar.

— ¿Lo harías?

— Sí ¿Por qué no?

— Ay, muchísimas gracias Jeno, tu siempre tan amables. Toma aquí está la lista y el dinero suficiente. —Dijo mi mamá entregándole lo mencionado.

— Señora, no hace falta el dinero, puedo pagar yo. —Insistió.

— No, no ¿como crees? Paga con éste dinero. —Dijo mi mamá.

— ¿Segura? Yo puedo hacerlo señora.  —Insistió Jeno.

— Segurísima, tranquilo. Sun, acompaña a Jeno. —Dijo mi mamá.

— No hace falta, señora. —Dijo Jeno.

— Sí, si hace falta Jeno, de paso toma aire y recuperan el tiempo que perdieron distanciados, eran los mejores amigos y hasta pareja fueron, ustedes terminaron bien, pueden ser amigos. Ve con el Sun.

— Está bien, está bien. —Dije y me paré de la silla donde estábamos.

— Genial, vayan con cuidado. —Dijo por último mi mamá.

Fuimos hasta el garage y nos subimos a un auto.

— ¿Y éste auto? ¿Es tuyo? —Pregunté abrochandome el cinturón de seguridad.

— Lo es. —Respondió.

— Muy lindo auto.

— Gracias. —Respondió sonriendo.

Jeno puso en marcha el auto.

— Que linda está la ciudad, como siempre. —Dije viendo la ventana.

— ¿Extrañabas aquí?

— Un poco, es decir, es mi país, pero no había muchas cosas para extrañar, mis recuerdos aquí no fueron todos buenos, solo algunos, me siento bien en Estados Unidos. —Dije.

— ¿Y entro yo en algunos de esos buenos recuerdos? —Preguntó.

— En algunos sí. —Respondí.

— ¿Algunos?

— Jeno, pasé toda mi adolescencia contigo y tuvimos recuerdos muy lindos juntos, pero no todo es una seríe estereotipada en amor de Netflix, lo que quiero decir es que también tenemos recuerdos malos o bueno, tristes.

— ¿Tienes mejores recuerdos en Estados Unidos que aquí? —Preguntó.

— Sí, allá tengo a mis amigos que son mi vida, ahí conocí a Jaehyun, el chico que más amo en el planeta. —Dije sincera.

— Me haces sufrir cuando hablas así de el. —Dijo.

— ¿Por qué? —Pregunté y frenó el auto.

— Me da celos, me da celos que ames a alguien que no sea yo, me dejaste en el pasado y siento que ya no te intereso como antes, me superaste, Moon Sun. —Dijo.

Jeno, no es así, si que me importas. —Dije sinceramente.

— No parece, hablas de cuánto lo amás como si entre nosotros dos no hubiese pasado nada en el pasado, como si a mí no me doliera todo ésto, te dije que aún te amo. —Dijo mirándome.

— Jeno, lo siento pero no digo nada para hacerte sentir mal, lo que digo de el es lo que realmente siento.

— Quiero que me vuelvas a ver a mi. —Dijo y volteé mi cabeza.— Mírame. —Tomó mi barbilla para que lo vea. — Me pierdo en tí, igual que en la primera vez, Sun. Eres tan hermosa.

— Jeno... —Dije sacando su mano de mi barbilla.— Esto es incómodo. —Dije, y el volvió a apoyar su mano en el volante, asintió con su cabeza y volvió a arrancar el auto.

Desde ese momento todo el camino estuvo más incómodo que antes. Hasta cuando íbamos a la casa luego de terminar de comprar lo fue.

— Amor, llegaste. —Dijo Jaehyun al verme entrar.

— Hola. —Dije y él me besó.

— Te extrañé, te extrañé. —Dijo abrazándome, yo reí.

— Amor, me fui un rato y nos vimos antes de dormir. —Dije y le sonreí.

— Sabes que no puedo estar ni un segundo sin verte. —Dijo.

I still love you. Lee Jeno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora