Un domingo a las siete de la noche, me di cuenta que tenía que ir a comprar cosas para la cena, mi nevera estaba totalmente vacía.
Junto con uno baggy pants de color gris y una camisa negra de algodón tomé mis llaves de el departamento y las de mi auto y salí de mi departamento y le pasé seguro a la puerta antes de llamar al ascensor.
El ascensor marcó que ya se encontraba en el sótano y las puertas se abrieron y mi corazón se rompió aún más de lo que ya estaba.
Era Camila y aquel chico besandose apasionadamente en el estacionamiento.
Ese chico debería besar a Camila en un lugar mejor que el estacionamiento, o eso haría yo, Camila es una maravillosa chica, merece que la besen en... no lo sé, un lugar más lindo. Estaba molesto, tristes, y congelado.
- Hola.- dijo Camila algo tímida.
- Hola Camz.- le respondí un suave hola de vuelta, puede que esté molesto con su novio por besarla en un lugar tan simple como el estacionamiento, pero no voy a hablarle mal, no a ella.
Salí del ascensor pensando que quizá, era algo tonto enojarme por el echo de que la haya besado en el estacionamiento, aunque eso no fué lo que de verdad me molestó, creo que fué porque el la besó. ¿Algún día dejará de importarme Camila?. No.
∆∆∆
El viaje desde el edificio hasta el súper mercado fué silencioso, no podía dejar de pensar que hace tan solo unos años era yo quién la besaba y acariciaba su cabello mientras ella dormía. Pensar que el ahora tiene ese privilegio hace que me odié por haberla dejado ir tan rápido.
Ahora ella está con alguien que no puedo ser.
Entré al súper, tomé un carrito y paseé por los pasillos de éstos tomando lo necesario para unas semanas.
Una vez con mi carrito llenó me dirijo a la caja pago, pero antes de irme la chica de la caja me llama.
- Si?.-
- ¿Cómo te llamas?.- pregunta suavemente
- Yo no debería dar ese tipo de información tan fácil, haber tú primero. ¿Cómo te llamas?.- dijo con una pizca de gracia al ver que está sonrojada... Cómo solía estarlo Camila cuando le decía cosas lindas. Dios como la extraño.
- Ellie.- dice tímida, ¡es una ternura!
- Soy Shawn.- ella me mira, y yo la miro.
Conectamos miradas unos segundos hasta que ella dice: "lindo nombre"
Asiento dulcemente - Gracias Ellie, el tuyo también.-
Ella vuelve a sonrojarse y le susurro un "adios"
Y antes de que volviera a darme la vuelta ella dice; -podrías darme tú número?.- está más roja que antes y dudo un segundo antes de responderle.
Si Camila puedo seguir adelante, yo también, quizá ella me ayude a olvidar, pero amarla va a ser algo que no pueda hacer. No quiero terminar lastimando a esta chica, pero sus ojos brillan y no puedo decirle que no, quizá pueda hacer una buena amistad con esta peliroja.
- Sí, claro.- digo y pongo las bolsas en el suelo y me acerco a la caja y anoto mi número rápidamente en un pequeño papel que me dió. Le devuelvo el bolígrafo y la pequeña hoja.
- Gracias.- dice suavemente
- De nada Ellie.- ahora sí tomo mis bolsas y me dirijo hacía la salida de el súper.
Busco mis llaves y abro el maletero de mi camioneta y meto mis bolsas allí para luego cerrarlo.
Flashback
- Y si te meto allí preciosa?
Cuestionó mientras las piernas las piernas de Camila se aferran a mi cintura y sus manos a mi cuello.
- ¡Shawn! ¡No soy un producto de el súper!- dice entre risas
- Oh, claro que no cielo, eres una reina, tú debes ir en los acientos de alante.- dijo y dejo besos varias partes de su cuello y su rostro.
Bajo a Camila de mí y cierro el maletero.
- Vamos a casa, mi vida.-
Fin del flashback
Mi mundo se derrumba al volver a recordar esos momentos.
Yo no debí dejarla ir tan fácil.
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Happier; Shawmila
Romance"Cariño, luces más feliz, ¿Lo eres? Sabía que un día te enamorarías de alguien más. Pero si él rompe tú corazón como los amantes lo hacen, quiero que sepas que estaré esperando aquí por ti"
