VENGANZA

Capitulo 28

*Narra Flor*

Esta vez si que me perdió. Nada de lo que haga, diga o prometa, hará que confié nuevamente en el. 

En estos momentos, Sergio, paso a ser un problema de segunda importancia, de que me sirve preocuparme de mi vida amorosa, sin antes preocuparme de mi propia vida. Se me hace muy extraño pensar en que, en un segundo todo esto puede terminar, literalmente, no se en que momento puede aparecer Estefanía, y matarme. 

No puedo con tanta carga mental, aun tengo que hablar con Gonzalo, proteger a Micaela, y por si fuera poco, solucionar un absurdo problema con Sergio. 

Despeje de mi mente todos esos temas, y me enfoque en lo que quería, ir a buscar a Micaela, nada se iba a interponer esta vez, asi no sea el horario de visitas, o su prohibición.

*Narra Micaela*

Ya han pasado horas o días en los que me encuentro encerrada en esta maldita habitación. No dejo de pensar en que estará pasando allá afuera. Mis amigos ¿Estan a salvo aun?¿Siguen todos con vida?. Me molesta pensar el hecho de que en mi vida tendré el recuerdo y la reputación de haber estado encerrada, en un loquero. La loca esta afuera, y me da tanta impotencia saber que no puedo confesar esto a nadie, o si no pondría en riesgo a todos mis seres mas queridos. 

Siento como intentan abrir la puerta. Vuelvo a hacerme la dormida. Había escuchado la conversación de los médicos en el pasillo, sabía que pensaban que estaba empeorando, pero en realidad las cosas estaban mucho peor allí afuera. 

En una de esas veces, se abrió la puerta, otra vez, 3 cuerpos, dos de mujeres y uno de un hombre. 

- Doctor, es momento de volver a colocarle el sedante - Dijo una voz femenina. 

- Así es doctora, es momento. Debemos ir a buscar el... - Se quedo callado, al escuchar un gran alboroto en el pasillo. 

Alguien entra de repente a la habitación, por lo que podía escuchar, era un señor, del cuerpo de seguridad. 

- Hay una intrusa escondida por el establecimiento. Se la ha detectado por las cámaras de seguridad. 

- ¿Como es que ha pasado esto? - Dijo la otra voz femenina - ¿Algún riesgo?¿Es alguien de afuera o paciente de aqui? 

- No se sabe, lo único que podemos decir, es que es rubia. 

Este es mi momento, Estefi vino por mi.

- Deberían cerrar las puertas de todas la habitaciones. E ir a protegerse, no se sabe con quien podemos estar tratando. 

Se fueron y escuche el ruido de la cerradura de la puerta. 

Por lo menos estoy encerrada, y tengo con que defenderme, miré el sedante que se habían dejado los médicos al costado de mi cama. 

*Narra Paio*

- Creo que me habías prometido algo. - Le dije a Pau, mientras entrabamos a su casa.

- ¿En serio? No me acuerdo, ayúdame a hacerlo.

Entramos a su habitación, entre beso y beso, cada prenda de vestir se iba saliendo de nuestro camino. 

- Esta vez, espero que Flor no nos interrumpa. - Dije mientras le daba besos por su cuello.

- Creo que ella tambien debe estar ocupada. 

- Ojala asi sea.

Ya estábamos completamente desnudos abajo de sus sabanas. Cuando de repente suena su celular. No puede ser, pensé, otra vez nos interrumpen.

- Numero desconocido. ¿Qué hago? - Me pregunto, frenándome los besos.

- No atiendas, estamos en nuestro momento. 

-No, puede ser Micaela. - Se enderezo, y me quito de encima suyo. - ¿Hola? - Puso en altavoz.

- No quiero interrumpir. - Dijo la voz al otro lado de la línea, una voz que odio. - Se que buscan su momento de intimidad, pero solo quería decirles, no me lo hagan tan fácil.

- ¿De que hablas maldita loca? 

- Se están eliminando solos, a Micaela la tengo ya muy apuntada, pero ahora... a Flor la veo muy sola, y metiéndose en problemas. - Corto la llamada.