Capítulo Dos

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Años después

— Ash, ¿Ese es tu nombre verdad? - habló unos de los chicos que estaba alrededor mío- eres el chico que nunca recibió amor de su padre y que por eso lo abandonó - Dijo con un tono de burla en su voz. El resto que lo acompañaba comenzaron a reírse yo simplemente guardé silencio, no quería meterme otra vez en problemas, además tenían razón, Mi padre si me había abandonado y estaba seguro de que él no sentía algún amor paterno hacía mí, no me hubiese abandonado si me quisiera - y que su madre murió por unas deudas y que decidió quitarse la vida como una cobarde – ese fue la gota que derramó el vaso. Podían decir lo que quisieran acerca de mi padre, pero no acerca de mi madre. -

Me levanté de la silla en la que estaba, Tomé la bandeja de comida con fuerza y le di un golpe en toda la cara al que había dicho eso, cuando este cayó al suelo comencé a golpearlo repetidas veces a puño cerrado en toda su cara, estaba cegado por el enojo, no iba a permitir que un pedazo de basura como él dijera eso de mi madre, sentí como alguien me tomaba de los brazos y me alejaba de él

— ¡Suéltenme! - grité al mismo tiempo que hacía todo lo posible para que me dejaran seguir golpeando a ese pedazo de basura, la persona que me estaba sujetando me sacó del comedor y los amigos de ese idiota fueron a ayudarlo. -

— ¡Te arrepentirás de hacer esto Ash! - habló uno de los amigos del chico que estaba en el suelo, lo último que vi antes de salir del comedor fue a uno de ellos haciéndome el gesto de pasar su dedo por su cuello como símbolo de amenaza.

El que me sacó de ahí no era nada más y nada menos que el inspector de la escuela, este al verme simplemente soltó un suspiro largo y negó repetidas veces con su cabeza mientras me miraba con desaprobación

— Sabes muy bien que es lo que significa esto Ash - dijo mientras se cruzaba de brazos - es la tercera vez esta semana que detengo una pelea en la cual estás involucrado. Por obligación debo de llamar a tus abuelos - Dijo con enojo en la voz- No puedes seguir golpeando a estudiantes así todas las semanas, con eso caerán consecuencias hacia tu persona, las cuales podrían incluso

— ¡¿Y por qué siempre soy yo el que sale perjudicado?! ¡Ellos son los que me molestan! - Grité molesto y una lágrima rodó por mi mejilla - ¡Son ellos los que me provocan! - con mi antebrazo limpié las lágrimas que habían comenzado a salir, el inspector tomó mi brazo y comenzó a caminar con lentitud -

- Hablaremos con ellos, ¿Te parece? Llamaremos a sus padres para que ellos también tengan una charla con ellos - Dijo mientras hablaba con un tono suave en la voz, yo simplemente lo miré, limpié nuevamente mis ojos con mi manga y asentí - pero aun así tendré que llamar a tus abuelos Ash, no puedo dejarlo pasar, lo más probable es que le rompieras a la nariz - dejó de caminar y tomó mi mano con la suya y me la mostró, tenía los nudillos rojos y también tenía sangre en estos - Si te vuelven a molestar así por favor antes de actuar piensa en cómo te perjudicara en la escuela y simplemente llámame, yo soy el encargado de que todo se mantenga en orden, no deseo que algún estudiante agreda a otro o que se agredan mutuamente

— Simplemente me defendí - Dije en un susurro, El encargado simplemente suspiró y me llevó a su oficina en la cual llamaron a mis abuelos. -

- Si señora, Gracias, hasta luego que tenga un buen día –Dijo el inspector colgando el teléfono este me miró, tenía sus manos juntas como si estuviera rezando, yo seguía con las manos con sangre del tipo que había golpeado – Tus abuelos no podrán venir, tu abuelo está trabajando y tu abuela se encuentra en una consulta médica. Te dejaré ir por esta vez Ash – Habló con un tono de voz serio y suave a la vez, Se levantó de su silla de cuero que tenía y me dio un pase de clases. - Ash –dijo mientras yo abría la puerta de su oficina por lo que lo miré de reojo – No te metas en más problemas, al menos no por lo que queda de día es un grandioso día, disfrútalo.

— Gracias señor Brown – Dije saliendo de su oficina mientras varios pensamientos se me pasaban por la cabeza. Podría luego de clases seguir golpeando a ese idiota. Aunque si estaba con su grupo sería un poco de desventaja ya que serían cuatro contra uno y no sería absolutamente nada limpia esa pelea.

  Me dirigí al baño de la escuela, si iba a volver a clases al menos debería de arreglar un poco mi apariencia, al entrar a este fui directo a los lavabos y comencé a limpiar mis manos, por el agua comenzó a caer la poca sangre seca que tenía en los nudillos he de admitir que me ardió un poco pero se sintió bastante refrescante en eso alguien abrió la puerta de golpe

Love, AshDonde viven las historias. Descúbrelo ahora