Vivir en un internado es genial,se disfruta de la libertad y puedes vivir bajo tus reglas(bueno,tus reglas y las de los maestros) ¡no hay nada mejor que vivir en la escuela de lunes a viernes!.
Está bien,para qué mentir. Vivir en un internado es una mierda. En primer lugar,sólo ves tu familia los fines de semana(si tienes suerte,hay gente que no sale de aquí nunca). Tienes que pedir permisos hasta para respirar.
Aunque lo peor, es no saber por qué tus padres te declararon la escoria familiar y te encerraron en una cárcel paga y disfrazada de escuela.
Cuando llegó Ethan, mi sexto hermano menor, mis padres decidieron que eramos muchos viviendo bajo un mismo techo. Resolvieron mandarme a mí y a Natalie(mi hermana) al internado: "Shawders Institute". Un enorme y antiguo edificio alejado del pueblo. Daba la sensación de ser colonial, la fachada era de un blanco antiguo que casi parecía amarillo y estaba lleno de enredaderas. El patio principal era gigante, lleno de pasto y esas cosas naturales. Las aulas eran bastante normales. Pero las habitaciones eran un asco: demasiado pequeñas. Sólo entraban dos personas por cuarto, había espacio para ambas camas, un escritorio diminuto y un armario. Por suerte teníamos un baño en cada habitación. Los "públicos" sólo se encontraban en el gimnasio. Dentro de todo,el asqueroso internado no estaba tan mal. Más que nada, si tu compañera de habitación es tan adorable y amigable como la mía... sarcasmo otra vez.
Sophie Jamie Lascott era un tema particular. Cuando la asignaron como mi compañera, luego de que la echaran de los otros pisos y sus compañeas de habitación rechazaran su presencia, le determinaron una habitación alejada en el primer piso,el más horrible,por supuesto. Cuando llegué aquí, a casi fines del segundo trimestre hace como dos años; no habían más cuartos que el de la temile Lascott. Su primera ¡y afectuosa! palabra de bienvenida para mí fue: "Si tocas alguna de mis cosas,te mato". Y evita hablarme desde entonces. Por suerte para mí, no está mucho tiempo en la habitación 334, así que puedo decir que no es tan mala compañera.
Gracias Jesús.
Natalie es dos años menor que yo, así que está en segundo año. Tiene quince y,debo aclarar, es exageradamente popular. ¡Cómo para no serlo! Es preciosa. Tiene el cabello castaño claro,aunque generalmente se lo tiñe de negro y es algo pálida. Bastante delgada. Buenos atributos. Un ser envidiable.
Yo tampoco estoy tan mal. Soy rubia, ojos celestes, no soy muy delgada,pero tampoco estoy pasada de peso. Mi problema es que no suelo hablar mucho con la gente. No es que sea antisocial, adoro estar con personas, pero no las aguanto demasiado.
En fin, soy un poco más del montón.
Y luego está él... Shawn Nates. O la perfección en persona. Cabello castaño,ojos azules,linda sonrisa,espalda y músculos marcados levementes,buen trasero ¡SÍ,BUEN TRASERO! Es perfecto. Pero,por supuesto, soy un poco más de la caca que lo persigue diariamente. No soy su única admiradora. Es el tema para hablar en casi toda la escuela. Y se sienta a sólo tres asientos de mí. Recuerdo el día en que levantó la mano en Historia porque no entendía el tema. Fue un 18 de julio, y fue genial.
Rosie dice que tengo una especie de obsesión con él. Y quizás sea verdad, pero bueno. ¡Es perfecto! Pero... hay algo que nunca cierra en él. Algo en su horrible y asqueroso mundo de popularidad y fama escolar que no encaja...
(Gala Smith en multimedia)
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All the damn time.
Teen FictionTodo el maldito tiempo que Gala miraba a Shawn Nates,se daba cuenta de que algo no iba bien con ese chico. Un brillo labial extraviado la unirá a la peor(¿o mejor?) suerte del mundo. ¿Qué oculta Shawn?¿qué es tan poderoso como para unir a dos adoles...