Octubre

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Siempre me pregunté, -¿Cómo es que mi jefe nunca cree en lo que le digo que pasa en el hotel?-, aunque le contara las cosas siempre me tomaban por loco, por lo que evitaba contarlo, hubo un día que me hablaron para que trabajara casi un doble turno por lo que este día entre a las ocho de la noche algo que sentía irónico y "divertido" era el hecho que era un 31 de octubre la fecha que celebran halloween, de igual manera ese mismo día como entré más temprano tenia a un compañero conmigo por lo que no estaría solo durante unas horas.

Solo había unos cuantos cuartos ocupados esa noche, mientras que mi compañero revisaba las reservaciones en el correo yo solo estaba sentado esperando que entrara algún nuevo huésped o llamaran por el teléfono, no pasaban de las 8:30 P.M. cuando el teléfono marcó un huésped diciendo -"por favor hagan que los niños dejen de jugar en el pasillo"-, como yo fui el que contesto le mencionaba,-"Claro, en este momento veremos de solucionarlo"-, justo después el huésped colgó , le mencioné a mi compañero que revisáramos los documentos de entrada de los huéspedes para poder saber que habitación tenia niños, como había pocas habitaciones no eran muchos documentos pero al revisarlos no encontramos ninguno que tuviera niños, de igual manera revisamos las reservas online de algunos de ellos porque hay veces que no lo escriben al llegar pero si cuando reservan pero eso nos llevo al mismo resultado, no había nadie con niños, justo al momento que terminábamos de revisar las cosas llamaron de nuevo diciendo -" hay niños golpeando mi puerta, no dejan de molestar"-, después de esa llamada al momento hubo otra con la misma queja, en ese momento le comenté a mi compañero de que fuéramos a verlo, hicimos un plan de subir los dos pero por entradas diferentes, como había un pasillo que conectaba las dos secciones del hotel queríamos evitar que se escondieran los niños por lo que yo iba a subir por la escalera que va directo y el iba por la otra entrada para evitar que se fueran el otro edificio, necesitábamos ser bastante silenciosos por lo que yo subí lentamente, cuando llegué a la mitad si llegaba a escuchar unas risas de niños, mi pensamiento era de "cuando me vean van a querer entrar al cuarto donde están sus padres, así podre hablar con ellos", cuando llegué finalmente al piso me llevé la sorpresa que no había ningún niño afuera , yo estaba confundido a causa que realmente había escuchado esas risas, al no ver a nadie fui directamente con mi compañero que igual subió me comentó que había escuchado las risas pero no vio nada, revise los alrededores y me di cuenta de una cámara que estaba grabando directamente al pasillo por lo que pregunté , -¿hay alguna manera de ver la grabación de esa cámara?"-, mi compañero mi contestó solo el gerente tiene acceso a la cámara y no lo que era mejor es que esa cámara era de las pocas que grababa igual sonido, aunque no era de gran calidad podríamos ver y escuchar lo del pasillo, lo que interesaba en ese momento era saber donde se metieron esos niños, llegando a la recepción llamamos al gerente y se le comentó lo que sucedía, aunque no estaba feliz tener que ir tan de noche a causa que ya pasaban de las 9 P.M.

Cuando el gerente llegó abrió su oficina donde tenía la cámara y revisamos la grabación, revisamos en el horario que hicieron las llamadas 8:30 de la noche, al revisar el video todos sentimos un escalofrió por lo que estábamos viendo a causa de que lo que veíamos era como las puertas de todas las habitaciones eran "golpeadas" ya que solo veíamos el movimiento de estas y por el sonido del video sabíamos que eran las puertas, subimos mas el volumen del video para que en ese momento escuchar a unos niños riendo, nunca lo olvidaré ese momento ,mi gerente que era escéptico de lo que decía que decía que pasaba en el hotel se quedó pálido al ver el video ya que no había explicación alguna de lo que sucedía, desde ese entonces el gerente evitaba lo más posible de ir al hotel en las noches y de mi parte me sentía un poco aliviado ya que al fin hice que creyera en todo lo que pasaba, aunque podríamos decir que ...lo aprendió por las malas.

El diario del recepcionistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora