Dancing Demons: Lucia [+18]

Dancing Demons 5/10

Dave se levantó del sofá sintiéndose algo mal, eran las 4 de la mañana y tendría que ir a trabajar como siempre lo hacía.

Como siempre, trataba de ser positivo y dar una alegre sonrisa mientras se acomodaba la corbata.

Luego abrió un libro y se puso a leerlo mientras esperaba a que la fría madrugada pasará a la mañana, y pudiese ir puntual al trabajo.

—¿Qué tanto lees? No lo entiendo...—Hablo Luther.

—Es la Ilíada. Ya sabes la guerra Troyana.

—Oh, ¿Esos qué creen en Apolo y esas cosas? Pobre de ellos...—Susurro.

—¿Uh?

—Oh nada, digo, que ya es algo tarde.

Dave miró su reloj para luego marcar la página del libro y levantarse. Su vehículo se había averiado meses atrás, así que lo más eficaz sería tomar el Bus hasta allí.

Luego de tomar el bus y llegar al centro de la ciudad. Llegó a ese maldito edificio el cual sus empresarios jamás le habían echo un cambio. La pintura rota y desteñida color gris decoraba el edificio y las ventanas viejas más de lo mismo.

Dave entró por la puerta principal del edificio dirigiéndose hacia en ascensor. Antes de entrar, vio a su jefe salir del ascensor con una caja un tanto grande y cabizbajo.

—Hey jefe. ¿Paso algo?—Pregunto Dave mirando como se dirigía hacia la salida.

Su jefe de paró y miró por encima del hombro.

—¿Qué? No, no paso nada.—Gruño entre dientes.

—¿Entonces por qué tiene esa caja?

Su jefe dio un suspiro y dejó la caja en el suelo.

—Mira, se que llevo casi 20 años jodiendote la vida, cosa que no me arrepiento.—Susurro.

Luther desde la mente de Dave le insultaba.

—Pero, bueno, me han despedido por culpa de tu...esposa. Buena suerte en la vida Dave.

Su jefe le dio unas palmadas en su mejilla, dándose media vuelta y tomando su caja saliendo del edificio.

—¿Desde cuándo estás casado Dave?—Le dijo Luther.

—¿Quizas sea esa asiática con la que me casé en la guardería cuando tenía 5 años jugando a las casitas?

—Joder ya se me ponen los pelos de punta de pensar en esa chica del Demonio. Daba canguelo...¿Quién será tu nuevo Jefe?

—¿La asiática? No lo sé...

Dave se metió en el ascensor y pulso el botón de la última planta, subiendo hasta la dicha.

Todos sus compañeros se notaban de alguna manera Feliz, mirando al dicho y dándole un Feliz saludo.

Dave miraba extrañado a su alrededor, estaba acostumbrado a esas miradas cansadas y sudorosas de sus compañeros artos como el de ese viejo trabajo.

—¡Dddddave!—Exclamo uno de sus amigos con una botella de alcohol en su mano, sus ropas algo rotas como de costumbre, su pelo naranja mal peinado y una gorra y gafas de sol en la oficina.

—Hey Richi. ¿Qué ha pasado aquí?

—¡Tiiiiio! ¡Tienes una suerte que te cagas! ¡Te han ascendido y le han subido en sueldo a todos los empleados de esta planta! ¿¡Sabes gracias a quieeen?!—El dio un pequeño eructo luego de tomar un trago de la cerveza.

—Uhh ¿Quién?

—T-t-t-tu-tu—Eructo—¡Esposa!

Como era Obvio Dave puso una cara extraña sin saber qué pasaba exactamente, el siguió caminando hacia su pequeño cubículo.