MADONNA - La Cruda Manada

Capítulo 3

NO OLVIDEN DARLE PLAY AL MULTIMEDIA! 

Les comparto un booktrailer de la novela.

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CAPITULO 3 – Mihail

Quien me escuchara pasar corriendo a estas horas y después de las visitas, tendría curiosidad por mi carrera, pero poco me importó, no podía quedarme y desquitar mi frustración con mi familia, no era culpa de ellos. No realmente.

Mi problema, era llamado por varias formas; Fiesta del lustro, Quinquenio, Reunión de emparejamiento. Un evento de lo más normal, al cual yo no quería asistir, me daba vergüenza mostrar mi cara y tener que soportar las miradas.

El inicio de lago quedaba retirado de las casas, pero seguí y seguí hasta que mi pecho ardía por el esfuerzo. Quería llegar, mi ansia por nadar en el lago era grande, mi realidad se estaba haciendo presente y no estaba lista. Justo ahora no lo diría en voz alta, pero tenía miedo.

Pero sobre todo, tenía vergüenza. Había sido tan ingenua.

Las fiestas de cada lustro son nuestra manera más escandalosa de juntar solteros y divertirnos durante la búsqueda una pareja.

Casi todos los machos iban, o no, daba igual; ellos siempre sobran. Solo tienen que cumplir un requisito para poder asistir; tener mínimo la primera fase lobuna, alcanzada. Entre los lobos, un macho sin su primera fase, no puede tomar por esposa a ninguna loba, es considerado incapaz de mantenerla y por lo tanto no apto. Al contrario; una hembra no ocupaba tener ninguna fase para asistir, y eso es porque las hembras siempre escasean -por alguna extraña razón de nuestra naturaleza-. El único requerimiento para la hembra es tener los 15 años cumplidos y una chaperona -otra loba-. Y aun así; asistías y solo ibas a ver, no podías buscar pareja formalmente hasta los 30 años, edad considerada como "apropiada" para elegir marido.

Tenemos una diferencia de números muy notoria, pero actualmente en nuestra cultura, una joven menor y mortal en nuestra especie, no está lista para casarse. En la época de mi mamá eso era muy diferente, fue todo lo contrario; ella era aún una niña cuando se casó, mi papá en cambio era un lobo viejo. Por parejas como ellos se enmendó el error de casar lobas, casi niñas. Mamá siendo joven y mortal, corría muchos riesgos, un mal movimiento de papá durante el sexo y ella podía salir herida, con una recuperación lenta, como una humana.

Ahora que sé más de nuestra naturaleza, me estremezco al pensar lo que vivió mi madre, al ser solo una mortal y virginal niña, casada con un alguien mucho mayor y con la presión social de embarazarse.

Para papá fue difícil con el paso de los años; su segunda esposa tampoco alcanzaba la inmortalidad, lo peor era que con el tiempo se había enamorado de ella y no quería perderla. Él nos relató su miedo, mamá dice que ambos lloraron cuando ella obtuvo su primera cana, él se veía con no más de 40 años humanos, y ella comenzaba a parecer cada vez más mayor. Cuando por fin mi madre llegó a primera fase, lo celebraron por días. Pero sus canas se quedaron, resaltando entre la negrura de su cabello, y son el horroroso recordatorio de que ella pudo haber seguido envejeciendo e irse.

Es por casos como el de mis padres, que las cosas fueron cambiando hasta lo que es hoy.

El aire se sentía helado cuando llegue al lago, estaba completamente solo, en silencio. La ansiedad bajo cuando vi el agua tan cerca, mi aun lugar favorito estaba esperándome, sentía como mi buen humor regresaba. No había pensamientos para nadie más, no había pendientes. Me quite rápidamente la ropa y entre al agua. El choque de temperaturas no impidió que nadara, cuando di varias vueltas y fue obvio que nadie me había seguido, pude tranquilizarme de verdad.