My first and last [yoonnie]

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Luego de su acalorada noche juntos, la joven pareja se dispuso a dormir un rato. No sabían que tener un orgasmo era, a demas de placentero, cansador.

Sin embargo, antes de caer rendidos prometieron con emoción volver a repetirlo siempre que pudieran. Había sido increible.

Jennie se sonrojó al ver a su novio, el capitan del equipo de básquetbol apareciendo en la cancha. Hoy tendrían un partido amistoso con una secundaria que no era de su agrado, asique darían lo mejor para patearles el trasero y volver a su casa pronto.

Agitó sus pompones y alisó su uniforme cuando el equipo comenzó a prepararse para el juego. Notó como Yoongi la buscaba entre las bancas y una vez que la encontró, le guiñó el ojo.

Ella hizo lo mismo y le dedicó un beso volador. Sin embargo, cuando Yoongi volteó, pudo notar su dura espalda y sus anchos hombros estirarse. El ejercicio le sentaba de maravilla y ver su cuerpo en el uniforme del equipo solo hizo que suspirara como una tonta mientras recordaba lo que había pasado entre ellos.

- ¿Te traigo un balde?

- ¿Eh?

- Para toda esa baba. -rió Chaeyoung, su compañera en el equipo de porristas.

Ella rodó los ojos pero aún asi sabía que tenia razon. Estaba tan completa y estupidamente enamorada de Min y de solo pensar en volver a su casa para pasar mas tiempo juntos le hervía la sangre.

El partido comenzó luego de cinco minutos y si bien el equipo local mostró una leve ventaja, cuando había pasado mas de la mitad se encontraban 4 puntos bajos y no había manera de remontarlo.

Yoongi estaba frustrado, podía verlo en su mirada y en sus manos apretando el balón. Sabía que estaría malhumorado luego y que de seguro pasarían por un restaurante para saciarse comiendo luego.

Cuando llego el medio tiempo, Jennie y sus compañeras hicieron su rutina tratando de animar a los jugadores, que bastante decaídos se veían. Era un amistoso pero la derrota sabía amarga no importa que circunstancias fueran.

Terminado el medio tiempo, Jennie le guiñó un ojo a su novio y se acercó a él con una botella de agua. Le dio un beso en la mejilla y recibió un suspiro frustrado a cambio, aunque eso no impidió que Yoongi se acurrucara un poco contra ella y le susurrara al oído: "Ya falta poco".

Jennie asintió y lo esperó ansiosa. Perdieron el partido y Yoongi se notaba cansado y desanimado. Ambos agarraron sus bolsos y se tomaron de las manos, se despidieron de sus amigos rapido y se fueron al auto del mayor.

Una vez dentro, Jennie encendió la radio dispuesta a mimar a su novio triste. Pudo notar un leve puchero mientras manejaba y sonrió con ternura.

- ¿Kentucky?

- Por favor.

Pararon el KFC, pidieron 3 ordenes grandes, un par de cervezas y refrescos. Ya en su casa pedirían helado mientras se acurrucaban juntos en la cama.

Bajaron del auto aún sudados y con sus uniformes pero con ordenes extra grandes de comida y las manos entrelazadas. Al entrar, la madre del muchacho los recibió sonriente en la cocina.

- ¿Como les fue chicos? -le dio un abrazo a cada uno y un beso en la frente a su hijo. -Lamento no haber podido ir, he llegado hace dos horas y dentro de poco debo irme de nuevo. -dijo con pena.

- No importa. -negó con la cabeza. -No valía la pena. -y sacando la comida rápida de las bolsas, tomo un nugget de pollo y empezó a comerlo bruscamente.

La señora Min buscó respuestas en su nuera y ella le sonrio de medio lado.

- Perdimos el amistoso hoy. -respondió y la madre de Yoongi asintió entendiendo.