𝐏𝐚𝐭𝐫𝐨𝐧𝐮𝐬

𝟏

Era un día común y corriente, el verano se estaba desvaneciendo de Hogwarts y por los terrenos del castillo se podían ver grupos de jóvenes magos recostados en el césped secándose por el cambio de las estaciones. Extrañamente, los alumnos de ciertas casas sentían más afinidad con unas que con otras, un ejemplo era al ver a los bullys de Slytherin con los tímidos Hufflepuffs o a los revoltosos de Gryffindor con los serios Ravenclaws.

Aunque el día era de lo más tranquilo para no hacer nada, todos tenían que ir a clases, especialmente los de quinto año, que se estaban preparando para sus TIMOs. Durante la tarde de ese día un grupo mixto de Ravenclaw y Hufflepuff entraron a su aula de Defensa Contra las Artes Oscuras, donde el profesor Remus Lupin los estaba esperando junto a un baúl que se movía de vez en cuando.

— ¿Qué hay ahí profesor? — preguntaron unas chicas de la casa de las águilas tomando asiento.

— Un baúl, ¿Qué no ven? — dijo Wyatt Brown, otra águila, aunque demasiado amargado para el gusto de los presentes.

Wyatt Brown había tenido una infancia muy dura o eso se decía de él, estaba en el equipo de quidditch, que era donde destacaba, según fuentes internas no tenía muy buenas calificaciones, pero nadie se metía con él porque era alto e intimidante, sus ojos verdes esmeralda y rasgados te juzgaban apenas te veía mientras que su cabello rojo oscuro y rebelde te decía que no le importaba lo que los demás pensaran de él.

— Muy bien clase, ya que todos tomaron asiento les hablare del tema de hoy, son los dementores, sus efectos en las personas y como combatirlos — dijo el profesor Lupin iniciando la clase del día viernes.

Mientras tanto, del lado de los Hufflepuff estaba una chica baja de estatura, cabello castaño claro rizado y  ojos café sonriendo mientras escuchaba las explicaciones del profesor anotando de vez en cuando en un pergamino, su nombre era Isla Roberts, nacida de muggles y una gran alegría que la hacía sobresalir de los demás tejones.

— Entonces, el hechizo para protegerse y alejarlos se llama "Expecto patronum", y si llegan a ser afectados necesitan chocolate cerca — mirando el reloj que tenía en la pared Lupin dijo a su clase de quinto año — nos vemos mañana con sus recuerdos más felices aquí mismo, pueden irse — agrego y abrió la puerta para sus alumnos.

Era hora de la cena, así que todos se dirigieron a sus mesas en el gran comedor, donde no tardo en aparecer el buffet acostumbrado frente a todos.

— Y bien Isla, ya debes de estar peleando internamente por cual recuerdo escoger, ¿no? — dijo su mejor amigo David tomando sopa de calabaza con su cuchara dorada y metiéndosela a la boca.

— Eh... si, no puedo decidir — contesto un poco nerviosa.

. . .

Llego la clase de DCAO del lunes y ambos grupos, águilas y tejones entraron al aula asignada, al entrar las mesas estaban puestas alrededor del salón y el baúl que tenía el profesor Lupin la clase pasada estaba en el centro, todos se acomodaron en circulo y empezó la clase.

— Aquí adentro hay un boggart que adoptara la forma y aptitudes de un dementor, pasaran uno por uno para combatirlo con el encantamiento patronus, al momento de invocarlo mentalicen su recuerdo mas feliz y todo estará bien —.

Todos asintieron un poco nerviosos, nadie quería ser el primero en intentarlo.

— ¿Algún voluntario? — pregunto el profesor mirando a los Ravenclaw, que normalmente eran los primeros en intentar cualquier cosa en su clase. — Brown, te toca — dijo sin más.

El chico paso entre los murmullos de todo el grupo, pues según ellos, Wyatt no tenia buenos recuerdos, pero en cuanto el dementor estuvo frente a él y grito Expecto Patronum todos se quedaron boquiabiertos al ver que de su varita salía una luz plateada con forma de erizo que hacía al dementor retroceder.

— Muy bien, un patronus corpóreo en tu primer intento, excelente, adelante Cruz — Lupin siguió nombrando alumnos de las dos casas, la mayoría de ellos podía hacer un escudo, pero no un patronus corpóreo, hasta que llego la hora de la alegre Hufflepuff — Tu turno Roberts —.

La chica se paró frente al baúl esperando a que el profesor lo abriera, sus manos le sudaban y casi se le resbala la varita cuando se posiciono, al mencionar el encantamiento, los estudiantes pensaban que de su varita saldría un animal plateado, pero para sorpresa de todos, la rubia cayo de espalda mientras temblaba, no había salido nada de la varita y el dementor la estaba acorralando contra el suelo.

— Ridikkulus — exclamo el profesor por detrás de toda la multitud y el dementor se convirtió en un auto de juguete que después guardo en el baúl — Eso es todo por hoy, pueden salir todos excepto Roberts y Brown — los solicitados se acercaron al escritorio mientras Remus Lupin esperaba a que todos salieran del aula para hablar con ellos.

— Bien chicos, creo que saben porque les pedí que se quedaran — águila y tejona intercambiaron miradas confundidas — Los pondré en pareja para que se ayuden mutuamente, te he visto Wyatt, no tienes muchos amigos, puedes hacer una mientras le ayudas a la señorita Roberts a poder conjurar un patronus, espero buenos resultados de ambos — y con una sonrisa los condujo a la puerta.

Cuando se cerro la puerta ambos caminaron juntos hacia su siguiente clase sin decir nada, el águila tomo dirección al aula de encantamientos mientras la tejona hacia herbología, sin darse la vuelta, el hablo.

— Nos vemos antes de cenar en el patio —.

— E-esta b-bien — contesto la tejona y se apresuro a llegar a los invernaderos.

La tarde transcurrió normal para ambos, ella riendo con sus amigas durante clases y el solitario moviéndose de aula en aula junto a sus compañeros de casa, al terminar la ultima clase del día se dirigieron al patio, no se saludaron, solo caminaron en silencio hasta alejarse del castillo.

— Bien, no me agrada estoy de ser amigos, así que lo limitaremos a clases, yo hablo tu escuchas, ¿entendido? —.

— ¿Y como piensas ayudarme a hacer un patronus si no sabes nada de mi? — espeto Isla rodando los ojos.

— Se lo necesario, eres Hufflepuff, nacida de muggles y la mas alegre persona que he visto, no entiendo como esto es un problema para ti —.

— Tu no sabes nada — dijo Isla dándose la vuelta en dirección al castillo.

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¡Hola a todos! Esta es mi primer historia, poco se habla de estas dos casas así que decidí hacer una historia con protagonistas de ellas en el año de nuestro profesor de defensa contra las artes oscuras favorito.

Sin mas que decir espero les haya gustado, no olviden votar y comentar <3