Capitulo II

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Jane


La chica rubia esperaba afuera de su casa a que su amiga llegara a recogerla para ir al colegio, estaba agotada de las conversaciones con su madre sobre ser la primera ministra de Inglaterra, le resultaba tedioso que estuviera todo el día con el celular pegado a su oreja hablando sobre su campaña, y perfeccionando con anticipación de varios meses la gran cena que estaba preparando para dar una motivadora charla sobre porque deberían votar por ella.

El cielo era gris aquella mañana en la ciudad de Londres , y Cameron se había ido temprano, volvió a mandarle un mensaje a su amiga Lana de que se apurara. Desde que a la chica le habían regalado su BMW de color negro, disfrutaba perder tiempo paseándolo por toda la ciudad, la rubia creía que su amiga tomaba caminos largos a propósito. 

Vivía en un tranquilo barrio privado de la ciudad, donde todas las casas tenían dos pisos, la de ella era de color blanco con grandes ventanales a todo lo largo, su arquitectura parecía vieja y unas escaleras de piedra te ayudaban a subir a la entrada en donde ella estaba sentada en ese mismo momento.

Alza la mirada del celular tras escuchar un golpe y a alguien quejarse, la patineta sigue rodando por la vereda mientras que su vecino, Aspen, se quejaba tirado en el suelo con una mueca de dolor.

 Hubo un tiempo, en que Jane y Aspen podían haberse considerado amigos, eran compañeros de juegos durante su niñez, pero cuando llegaron a ese tramo de la adolescencia donde Aspen creía que ya era demasiado genial para perder tiempo en juegos de niños y decidió concentrarse en sus cosas, y perdieron contacto, como todas las amistades de la infancia en la que simplemente las cosas cambian y se distancian. Y mas allá de eso, su contacto se volvió sumamente nulo cuando lo dejo de ver por largos años.

Se levanta de los escalones caminando a la patineta donde la agarra con sus manos y se acerca a Aspen, el castaño estaba arrodillado en el suelo observando las palmas de sus manos con una cara de disgusto.

—¿Estas bien?—pregunta ella, Aspen alza su mirada, los ojos grises del chico hacen contacto con ella.

—Si, solo un truco que salió mal—dice levantándose agarrando la patineta con una mano—Vi que tu mamá está haciendo campaña.

—Mi pregunta seria, ¿Quién no la vio? Su rostro esta en toda Inglaterra, eso es casi vergonzoso a decir verdad.—comenta ella.—Ayer te salude...

—Estaba con auriculares—dice el chico, y por la forma que evitaba verla, parecía que mentía.—No se si te lo dije, pero lamento lo de Alex.

Un golpe de tristeza sacudió el pecho de Jane, y aprieta los labios. Asiente levemente mientras suelta una bocanada de aire.

—Si...nos tomo tiempo volver a estar bien—dice ella viendo el chico—¿Cómo esta tu mamá?

—Dejaremos la conversación pendiente, creo que vinieron a buscarte—se voltea a ver quien era, pero no se trataba del BMW de Lana, si no de un Audi plateado, en el asiento del conductor se encontraba Jackson. El chico levanta levemente el mentón como un tipo de saludo, luego se baja del auto y camina hacia ellos. Abraza a Jane por los hombros y besa sus labios.

—Hola guapa, ¿vamos? Llegaremos tarde.

—Claro...Jack, él es mi vecino Aspen.

El castaño pone la patineta debajo de su axila y extiende su mano, pero Jackson mira de su mano al chico, se relame levemente los labios.

—¿Tu no eres el tipo que estuvo en una especie de hospital psiquiátrico?

—¡Jack!—dice Jane escandalizada, Aspen baja su mano sonriendo con ironía.

Die for Secrets| [Secrets #1] [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora