D.6. trabaja! floja!

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Fuí a buscar el Reloj que había escondido en el closet de mi abuela. la agarré en mano y dije en voz alta;

- ¡eres un niño de las flores...! ¡ven acá!...ehm... Leon de los Montes.- 

hubo una ventisca con olor a flores.- ¡¿Cual  niño de las flores? enana siniestra!.-

- pelo de pincho!.-contesté.-...te llamé porque resulta, que dentro de toda situación en la que me metí por ti; no sé que excusa les voy a decir a mis padres cuando me vean desapareciendo y reapareciendo de la nada en mi casa.-

Leon  asintió su cabeza en comprensión.- Así que de eso se trata.....ok, donde están? >:D.- dijo levantando su mano derecha rectamente.- esto se soluciona igual que la barrera del idioma.-

-¿¡que, que?! ¡ya va!¡no!¡ellos ni siquiera están ahorita!- lo detuve jalándolo de un brazo.- ¡no quiero que les andes repartiendo cachetadas! a duras penas te conozco yo, ellos ni sabrán quien eres tu y cuando menos acuerda le vas a dar una cachetada!¡¿estas loco?! ¡solo dime algo realmente ingenioso para convencerlos o al menos diles tu de una manera calmada y normal!.-

me miró con un puchero .-de acuerdo.... los esperaré afuera, al frente del árbol y no usaré ese método, aplicaré otro..... llorona.-agregó.-...solo les induciré para que nunca sospechen tus repentinas ausencias.-

-gracias, eso espero.-

-ok, ok! fuera de aquí! vete! vete!.-

-ah?!! a donde?!.- O-o pregunté. creí que yo presenciaría la charla.

- A donde más?! vete a ver si obtienes un trabajo.- me puso en las manos el reloj y el libro>:D

-no puedo hacer eso! no tengo documentos, ni siquiera tengo ropa para la situación!.- le expliqué alarmada.

-no importa. ¡chao!.- chasqueo sus dedos, con tan solo eso me mandó al otro plano alterno.

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Donde "aterricé" fue en un pasillo. como me tropecé me caí de espaldas a una puerta.

¡PHTHUAM BM!

-aahhh......- le dolió mucho a mi trasero y espalda.

Cuando me pude levantar, para mi sorpresa tenía ropa del siglo XIX, otra vez.

estúpido niño de las flores....

Me levanté y colgué  el reloj a mi bolsillo de nuevo, seguí con el libro en la mano. Naturalmente no sabía con exactitud que dirección tomar. A punto de tomar esa decisión al azar. sonó una puerta abriéndose. miré hacia atrás de inmediatamente. Era la misma puerta en la que me caí.

-Disculpe, señorita. ¿se encuentra bien? por como se escuchó creo que se ha caído, ¿se ha hecho usted daño?.-Se trataba de una mujer, no llegaba a los 40, no mas alta de 1.65 cm y con mechones de pelo a los lados.

-hola,s-si!si, estoy bien, es solo que me tropecé y perdí el equilibrio, pero no me hice daño.-mas que mi dignidad.-gracias por preocuparse, es muy amable de su parte.- dije nerviosa. como siempre, en una situación de este tipo, mi corazón latía a mil, de la vergüenza y los nervios de que casi me atrapan apareciendo en el aire.

-de acuerdo, me tranquiliza que usted no se haya hecho ningún daño. pero... señorita, si no es muy grosero de mi parte preguntarle. ¿que hace usted aquí?.-

oh-oh..... " a ver si obtienes un trabajo!"..........eh.. responde formal!!, responde formal!!!

-Lo que pasa, es que vine gracias a mi amig - digo, primo, porque quería ver si podría encontrar un empleo aquí, y después de que entrar me perdí, deambulaba hasta que... me caí.- ideé una mentira basada en parte de lo que sucedió ayer y el resto a mi imaginación.

Tu Canto es OstinanteWhere stories live. Discover now