ꜱᴄᴏᴘᴀᴇꜱᴛʜᴇꜱɪᴀ ||ᴹᵉᵗᵉᵒʳ ᴳᵃʳᵈᵉⁿ

𝟎𝟎𝟒

-Hui, Lei te miraba demasiado, ¿No te has dado cuenta? -Dejé el móvil en la mesa y miré a Shancai.

-Puede ser, pero no me importa. -Suspiré y comencé a guardar las cosas, ya no quería quedarme. A los pocos segundos me levanté y me colgué la mochila al hombro, todo esto seguida de la mirada de Shancai.

-¿Te vas? -Me pregunto ella a la vez que se levantaba y empezaba a guardar todo.

-Sí, capaz que ahora venga el rey de España y me diga que me tengo que ir. -Le respondí con cierta molestia.

Salí de la clase a paso rápido, con Shancai pisándome los talones, pero de repente paré de golpe al ver a Leí apoyado en la puerta de la clase, y Shancai sin esperarselo chocó accidentalmente contra mi espalda.

-¿Pero qué te pasa Hui? -Dijo Shancai protestando mientras tomaba del suelo algunas cosas que tiró al chocarse. -No frenes así, casi me mato.

-Pensaba que te llamabas Shancai. -Dijo finalmente Lei al ver que no respondía. Yo, confundida, miré a Shancai y le señalé.

-Ella es Shancai, yo soy Hui. -Dije aún confundida mientras fruncía el ceño. Miré como Lei miró a Shancai para luego volver a mirarme, acabó sonriendo al saber de su error.

-Está bien, Hui es más bonito. -Colocó su mano en mi hombro para después ir se como si nada. Sonreí involuntariamente.

-No sé si te has dado cuenta... Pero me acaba de restregar que mi nombre es feo. -Acabé riéndome tras darme cuenta. Lei era un chico raro, a diferencia de los otros tres.

-No seas tonta, no ha dicho eso. -Mientras caminaba hacia mi taquilla, Shancai me empezó a hablar sobre otros temas, a la vez que iba dando mi opinión arreglaba mi taquilla y guardaba las cosas que no iba a necesitar.

Pero sentía algo raro, notaba una mirada encima mía, era una sensación extraña, y me incomodaba. Giré la cabeza para mirar a mí alrededor, pero no pude ver a nadie o algo fuera de su lugar. Giré nuevamente la cabeza hacia otra dirección, ahí pude ver  alguien en la esquina observándome, pero al ver que cruzamos miradas se fue rápido.

No pude ver claramente de quién se trataba, pero sí podía confirmar que se trataba de un chico. Sinceramente, me habían dado escalofríos.