Total Eclipse of a Heart 🌙 (LIBRO 2 - TO) ✔

🌙 Prologo

🌙Prologo 🌙

Inglaterra, 1492:

"Querido Klaus:

Lamento tener que hacer esto, juro que si hubiese otra opción no tendría que tomar esta decisión. Pero lamentablemente, no hay nada que podamos hacer. Las cosas ya no están yendo como antes, tu obsesión por encontrar a la doble de Tatia se te está escapando de las manos y siento que es como una enfermedad: te está comiendo por adentro y tarde o temprano, se terminará apoderando de ti.

Quiero que sepas que siempre, siempre, te amaré pero por el momento yo...no puedo seguir con esto. Lamento tener que hacerte pasar por esta situación y también lamento no decírtelo personalmente pero, cómo ya sabes, no se me dan muy bien las despedidas y tampoco creo tener la fuerza emocional necesaria para poder decirte "adiós".

Apreciaría que no me busques, yo sabré cuando regresar. Gracias por estos hermosos años que hemos compartido. Gracias por todos los bellos momentos que hemos creado juntos. Gracias por amarme.

Lamento si te hago sufrir con la decisión que he tomado, pero creo que es por el bien de los dos. No importa cuántos años pasen hasta que yo regrese a tu lado, debes de saber que siempre, siempre, serás el único que ocupará mi corazón.

Por siempre tuya, Thalía"

Debajo de la firma, el rastro de una lágrima borraba la tinta. Thalía se mordió el labio. Ya no había tiempo para arreglar ese pequeño error. Debía irse cuanto antes. Se aseguró de dejar la carta sobre el escritorio de Klaus, más precisamente en un lugar donde se pueda hallar fácilmente, y se encaminó hacia la puerta.

Cubriéndose la cabeza con la capucha de la capa roja, atravesó los pasillos. Elijah le había prometido que en cuanto las campanadas fueran doce, él se encargaría de distraer a Klaus, dándole el tiempo suficiente para que ella pudiese huir. Su dama de compañía, Janna, la esperaba en el establo. Para el momento en que la figura de Thalía era dibujada por las llamas de las antorchas, las campanadas comenzaron a sonar.

Al llegar a una curva, se detuvo. Sus mejillas estaban rojas y el pecho le subía y bajaba. Las antorchas iluminaban su sudoroso rostro. Tras respirar profundamente, se tomó los costados del vestido y, tratando de caminar lo más normal que pudo, se acercó al arco de piedra que daba al patio principal.

-Buenas noches.-saludó a los dos guardias, apostados a cada costado del arco. Ambos inclinaron la cabeza hacia ella.

-¿Se le ofrece algo, mi señora?-preguntó uno con un tono seco y demasiado respetuoso.

Thalía miro para todos lados y se acercó más a ellos.

-Sí alguien pregunta por mí, más concretamente: si Lord Niklaus pregunta por mí, ustedes jamás me vieron pasar por aquí, ¿de acuerdo?-

-Sí alguien, incluyendo a Lord Niklaus, pregunta si la hemos visto, diremos que no.-repitieron ambos soldados.

Thalía se aseguró dos veces más de que ellos repitieran exactamente lo que ella había pedido, y luego giró sobre sus talones para retomar el camino hacia el establo.

Sus pasos se silenciaron en cuanto ella pisó el heno seco.

-Mi lady.-ante Thalía apareció el joven rostro de Janna. Detrás de ella iba Rose, la hermana de su dama de compañía.

-¿Qué hace ella aquí?-preguntó Thalía, acomodándose la capa roja sobre su espalda.-Te dije que nadie debía de enterarse.-

-Si voy a arriesgar la vida de mi hermana, al menos quiero estar tranquila de que estará a salvo en cuanto salga de aquí.-murmuró Rose.

-Sabes perfectamente que lo estaré.- replicó Janna, mirándola con el ceño fruncido.- La señorita Thalía siempre ha sido buena conmigo.-

Las campanadas se dejaron de escuchar. El corazón de Thalía latió con muchas más fuerza mientras miraba por encima de su hombro.

-Debemos irnos.-dijo, tomando las riendas de su caballo.

-Nos vemos, hermana.-Janna besó dos veces las mejillas de Rose, antes de tomar el segundo caballo.

-No tienes de que preocuparte.-habló Thalía, mirando hacia el patio.-La mantendré a salvo.-

-Eso espero.-Rose la miró ceñuda y con las manos en forma de jarra.-De todas formas, suerte.-Thalía asintió y espoleó su caballo. Ambas salieron por la parte de atrás del establo, bajo la protección de la luna.

A medida que se alejaban, el corazón de la rubia se contraía. Desde que había conocido a Klaus, supo que tenía una intensa conexión con él y todo fue perfecto cuando Ayanna le reveló que él era su igual, (mediante una forma bastante indirecta).

"Nunca quise romper tu corazón, amor mío." pensó mientras su caballo adquiría velocidad y se alejaba aún más del castillo. "Haré lo que sea para hacer que esto vuelva a ser lo de antes"

*.*.*

¡Hola!

Mil perdones por haber tardado tan en subir la segunda parte, pero como verán, al fin les traigo el prólogo. Es algo corto y tal vez será algo confuso, sí es así, me lo hacen saber y me voy a encargar de explicarlo para que les quede claro (tal vez lo vaya haciendo a medida que avance con los capítulos)

En fin, espero que les haya gustado y mil, mil, mil gracias por haberme apoyado. ¡LAS QUIERO!