7ma Carta

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Ha pasado bastante de la última vez que te escribí, sentí como si te hubiera abandonado y te juro no es así. La vida-aunque no quiera- avanza, y con eso me refiero a que he estado estudiando y poniéndome al día con las materias de la universidad. Otra razón por la que no te había escrito, es que Mariane- después de muchos años- se comenzó a dar cuenta que la depresión venía acompañada de una persona, por eso tuve que contarle de vos y estas cartas, ella dice que debo de hablar con mis padres, decirles que a pesar de los años aún me niego a creer que estás muerto, y que me duele tu ausencia. He intentado hacerlo, de verdad, pero cuando quiero hablar, de mi boca sale cualquier cosa de cualquier tema super positivo y con una gran sonrisa en el rostro... no sé cómo afrontar esta situación, creo que sería más fácil incluso decir que soy gay ¿por qué el tema de la depresión es tan difícil de afrontar? Como siempre nada de esto es muy fácil.

Estuve una semana sin tomar los medicamentos de Sali, y empecé a tener sueños extraños, unos sin sentido y otros que si... hubieron 4 sueños que creo que fueron contigo... digo creo porque no estoy muy segura y uno en el que iba a tu tumba pero acompañada, tu tumba se veía diferente, mucho más linda, no sé con quién estaba, no sé si eras tú, los otros sueños fueron extraños, yo iba en bicicleta era un poco más del medio día, al parecer estaba enojada y huía de todos, salía incluso del pueblo, hasta llegar a una parte con una espesa neblina oscura y fría, al atravesarla parecía como si anocheciera y en realidad era plena tarde, pero sin miedo seguí adelante. A pocos metros de salir de esa neblina a la izquierda había una hermosa mención, pero alrededor no había más nada, estoy seguro que ya estaba fuera de mi pueblo. Sin pensar fui hasta esa mansión, me atendía un mayordomo que me decía que había llegado tarde y me estaban esperando, me dijo que pasara hacia el jardín, como si conociera la casa llegue hacia el lugar sin ningún problema. Había una pequeña piscina, del tamaño de un yacusi, me saqué la remera y me metí, con toda la confianza, hacia mucho calor-pensé-. Al poco tiempo llega un hombre un mayor de unos 30, no recuerdo su rostro, le decía que se metiera también a la piscina, pero como se negaba, comencé a mojarlo, me relaje con él esa tarde, al anochecer regrese a mi casa. Ese sueño lo tuve varios días, hasta que una vez, luego de hacer lo de siempre, estaba en la piscina y llegó una moto, desde el jardín se podía ver la entrada de la casa, el mayordomo, el hombre y yo estábamos sorprendidos, al parecer nadie sabia la existencia de esa mansión, era un secreto, la mirada del hombre me atravesó, me preguntó quienes eran y qué hacían allí, trate de explicar que no había dicho nada y no tenía idea de cómo supieron. El hombre se escondió, el mayordomo salió a atenderlos, yo me escondí a pesar de que es difícil visualizar el jardín desde el frente ya que la mansión se robaba la mirada, cuando pude ver quiénes eran los de las motos, me di cuenta que eran unos compañeros de mi equipo, pero yo no les había dicho nada, según le dijeron al mayordomo, les habían dicho que entregaran un paquete a esa dirección, el mayordomo los hizo pasar. Entré por detrás, hasta llegar a una habitación en el segundo piso, al parecer tenía rompa allí como si ese lugar fuera mío, me cambié la ropa y sequé el pelo, estaba listo para salir con cuidado sin que se percataran de mi presencia, pero fallé, el mayordomo los había dejado esperando en la sala de estar, y yo pensaba que estaban en la cocina que quedaba al lugar opuesto, se sorprendieron al verme allí e imaginaron que estaba a cargo del lugar, les dije que era mejor que se fueran, pero uno de ellos llamó a dos chicas más, que llegaron solo 10min después, el hombre bajó y se dio cuenta que había mucha mas gente, su mirada acusadora me atravesó, la decepción en sus ojos me hicieron un hueco en el corazón, sentía que lo había defraudado, había revelado aquel lugar secreto. El hombre no agredió a los demás al contrario se mostró agradable y los dejó quedarse hasta el anochecer, pero cuando todos se fueron todos, me dijo que no podríamos vernos más, si más personas se enteraban de ese lugar le iba a causar muchos problemas.

Estoy muy confundido... siento que aquel sueño tiene muchas cosas para revelar de mí... y una parte cree que aquel hombre eras tú, y si realmente lo eras, perdón por fallarte, aunque en realidad no lo hiciera. Pedí y rogué tanto el al menos verte en algún sueño... quiero creer que si eras tú, y lamento no poder recordar aquel rostro.

Desde esas semanas, los sueños hicieron ponerme triste de nuevo, vuelvo a sentirme ausente por momentos, y otros en los que me despido de todos, pensando en acabar con todo y poder preguntarte todo esto en persona, solo son instantes, no te preocupes, no haré nada imprudente. Le conté también a Lía sobre estos sueños, y me dijo que seria mejor ir a verte, hoy iré con ella, Mariane me dijo que tal vez no he podido llorar en frente tuyo por estar acompañado de mi familia y no querer mostrarme débil, que es algo inconsciente, hoy al ir con Lía veré qué sucede y lo contaré en la próxima carta.

Te amo para siempre querido hermano del alma 

Cartas al cieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora