𝑰𝑵𝑬𝑵𝑻𝑬𝑵𝑫𝑰𝑩𝑳𝑬 [𝑳𝑨𝑴𝑺 𝑫𝑬𝑷𝑹𝑬𝑺𝑰𝑽𝑶]

❝𝐇𝐄𝐑𝐈𝐃𝐀𝐒❞

Miércoles.

El día donde según el nuevo horario Alexander tenia educación fisica. Odiaba eso pero no tanto como a si mismo porque es autodestructivo gracias a sucesos de su terrible pasado.

Quería borrarlo. Quería no recordar aquello.

Y sin más, evadiendo aquellos pensamientos, se dirigió a la secundaria a empezar un "lindo" día.

Empezó a caminar con tranquilidad aunque sabía que estaba llegando tarde, realmente no le importaba.

En el trayecto también pudo ver a John, ambos estaban atrasados, rió para sus adentros.

Corrió hasta alcanzarlo.

—¡Hola! —. Sonrió al hablarle al de pecas incontables.

—¡Hola Alex! —. Dijo John con estusiasmo con una pequeña sonrisa. Alexander le dio ternura tal apodo.

—¿Cómo estás? —. Preguntó Alexander Candia mientras lo miraba a los ojos.

—Horri... —. Se detuvo al hablar, no podia decir la verdad. —Bien —. Dijo al fin.

El chico quedó dudoso, pero no dijo nada. No quería dar impresión de que era una persona indiscreta.

—Bien uhm, ¿entramos? Estamos bastante atrasados—Rió John, a Alexander le dio ternura aquella risita.

—Claro—Sonrió y entraron.

Se dirigieron a el patio, el profesor de educación física los miraba con disgusto.

—¿Me pueden explicar porqué tardaron tanto?—Dijo, estaba molesto y era notorio.

—Tuvimos problemas externos—La voz de Candia había sonado cortante al decir eso.

—Como sea, vayan a cambiarse.—Ordenó.

Alexander notó que John se estaba poniendo bastante nervioso, se hizo una idea del porqué, a lo que le dio ternura, pero nunca imaginó lo que en realidad le pasaba.

Aunque si era sincero, tampoco quería cambiarse debido a inseguridades, pero no tenía más remedio.

Entraron a los vestuarios como el profesor les había indicado.

Mientras se cambiaban, de vez en cuando Alexander miraba a John porque no le importa nada y es todo un picante.

Cada vez que lo miraba notaba un nuevo moreton.

—J-john, ¿puedes explicarme por qué tienes tantos moretones?—Preguntó con preocupación.

—¿Puedo preguntar por qué estabas observandome?

Alexander se sonrojo ante tal pregunta, ni siquiera él sabía por qué lo estaba haciendo, pero le preocupaba que John estuviera tan lastimado.

—N-nada, solo me había volteado —. Se golpeó mentalmente, no sonaba creíble.—Ahora, ¿puedo preguntar sobre los moretones?—Cuestionó, John tragó saliva.

No sabía que responder.

—S-solo me tropece —. Dijo Laurens sin mucha convicción.

—Ah... Bueno, espero que no te duela mucho...—Respondió dudoso, no le sonaba nada creíble.

Candia notó que el chico tenía banditas adhesivas de el popular personaje japonés Hello Kitty lo que se le hizo tierno.

Hubo una tensión que era palpable en el ambiente, cuando terminaron de cambiarse, salieron y tuvieron su clase con normalidad.