Capítulo.- 12

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Aun con Kilian en mis brazos observaba como Elin y Christian sacaban aquellos paquetes de drogas de las maletas, colocaban frascos encima de otros, frascos de color café que estan perfectamente colocados en una línea, habia diez frascos en cada paquete, tres maletas llenas de esa droga que ya estaban siendo analizadas por Bastián y Rami.

Christian, quien ya habia vaciado la ultima de las primeras tres maletas, la cuarta que estaba el piso fue colocada en un pequeño espacio vacío sobre la mesa, y al abrirla habia pequeñas tiras de plástico con pastillas color celeste, rosadas y amarillas, sin omitir algunos frascos plásticos transparentes que daban a notar pastillas rojas en estos.

Eran circulares, todas y cada una de ellas en su mismo tamaño. Christian, tomo una de las que estaban en aquellas tiras plásticas y la desprendió entregándosela a Ian quien ya habia comenzado a curiosear. Cuando el ojiverde la tomo la miro atento, una media sonrisa se le plasmo en los labios y después comenzó a quitarla de su segunda envoltura.

─Me imagino que sabes como funciona el éxtasis, Somerhalder ─miro a Bill quien sigue de brazos cruzados, Ian solo asiente cuando logra sacar por completo aquella pastilla de su envoltura.

─Excelente droga para los adolescentes y adultos jóvenes ─miro a Christian─. Hace que quien la consuma tenga subidones, alucinaciones... magnifica droga de diseño, logramos venderla en los centros nocturnos de Suecia.

─ ¿Se vende bien? ─pregunto, a lo cual asiente de inmediato.

─Como pan caliente, Sra. Jackson ─Christian me sonríe─. La escopolamina es alucinógena y depresora del sistema nervioso central, Sra. Jackson... Con esta debería tener cuidado de no mezclarla con alguna otra, Bill me dijo que quería que le diéramos en forma inyectada y en pastilla, así que... Cuidado, son frágiles los frascos.

─Vaya mina de oro... ─Ian responde con una amplia sonrisa─. Es decir, jamás imagine que podría ver este tipo de drogas de nuevo.

Son drogas completamente nuevas para mí, es decir... habia logrado tener la oportunidad de venderlas en algunas ocasiones, desgraciadamente nuestro distribuidor tardaba meses en conseguirlas, su manera de lograr dar con amplios vendedores de estas nos traía a la desesperación y conformarnos con lo poco que estuviera a nuestra disposición.

Pero ahora, de verdad que esto es algo que me ha dejado impresionada, el nivel de distribución que tiene Bill es tan grande, que no me cabe en la menor duda que este sujeto es alguien que mantiene su propio régimen de poder.

Bastián luce más que atento en cada pequeño frasco, en cada tira plástica con esas miles y miles de pastillas de colores, simplemente, el chico sabía cómo funcionaba cada una de estas y claro, lo bien que se venderían en los centros nocturnos, bares y discotecas de la ciudad.

Christian, baja las maletas cuando estan completamente vacías y en cuanto Elin, la chica a tomado un par para salir del almacén rumbo al auto como he de suponer, Christian le ha seguido la acción de ayudarle con las maletas que quedaban para salir del almacen.

En cuanto a Ian y Bastián, se han dedicado a llevar todas esas drogas a un sitio donde estén un poco mas seguras.

─ ¿La he convencido, Sra. Jackson? ─fijo mi atención nuevamente a Bill, quien al hacerme aquella pregunta me lleno de cientos de respuestas, pero solo una era aquella que quería decirle, pero... aún seguía en duda.

Cargo mejor al niño que ya habia comenzado a moverse de más, a tal punto que estaba un poco más debajo de la zona en que lo tenia cargado, es decir, a comenzado a gatear y a caminar por si solo con ayuda de sujetarse con las cosas, sé que para él es algo nuevo y algo que le ha encantado hacer, sobre todo si hace destrozos por donde quiera que pasa.

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