cap 5 te extrañe mucho

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-¡¡¡ahh!!!!- grite del susto y la emoción y ella despertó

-¡¡ahhhh!!!- grito asustada y me tiro gas pimienta en los ojos luego se dio cuenta de quien era

-auch! auch!- dije yo refregando mis manos en mis ojos

-hay, lo siento, lo siento- dijo ella para luego llevarme al baño para limpiarme la cara

-duele!!- gritaba moviendome de un lado al otro retorsiendome del dolor mientras ella me lavaba los ojos

-lo siento lo siento, quédate quieto así te limpio la carita- dijo a lo que yo me quedé quieto y ella termino para luego mirarme

-¿que haces aqui?- pregunte a lo que ella me miro confundida y pregunto

-¿tu que haces aqui?- dijo ella muy confundida mirandome

-esta es mi casa, la pagaron mis empleados para que pudiera quedarme estos días, tu estas invadiendo mi territorio- dije y la mire a lo que ella fruncio el ceño

-esta es mi casa y tu estas invadiendo mi territorio querido- dijo ella muy indignada para luego ponerse una bata

-voy a llamar a Sebastián- dije porque debía hablar con él después de este gran incidente

-hablaré con Claudia- dijo ella pareciendo que estaba muy molesta y indignada ambos llegaron al mismo tiempo ya que estaban abajo

-¿que necesita mi señora?- pregunto una chica con toda ropa de una marca similar, era morada y negra decía "Raven" Y tenía un pequeño cuervo la etiqueta, bueno la chica era alta muy delgada pareciera que se notan un poco sus huesos, de pelo corto rubio, ojos marron claro, no hace falta que diga que plana pero si

-¿que no habías comprado este lugar?- pregunto Raven aún indignada

-disculpe mi señora acaban de avisarme que hubo un error y ambos rentaron la casa por todo este tiempo, no se preocupe solo será este tiempo luego podrá comprar la casa si es lo que desea- dijo la mujer intentando calmar a Raven

-esta bien- dijo ella

-¿señor usted que necesitaba?- pregunto Sebastián quien es un chico de tamaño promedio moreno de ojos azules y pelo negro delgado

-¿que pasara?- pregunte a lo que él me miro

-bueno podríamos irnos de aquí y rentar otro lugar hay muchas casas lujosas por aquí- dijo a lo que yo reaccione

-¡no!- dijimos en unísono Raven y yo

-quiero esta casa puedes retirarte Claudia- dijo Rachel para después mirarme

-puedes retirarte Sebastián- cuando ambos se fueron quedamos mirandonos con algo de deseo en nuestros ojos y con sed del otro en todo nuestro cuerpo

-y bien... ¿como te ah hido todo este tiempo?- pregunto ella quitándose la bata

-mal... te extrañe mucho ¿sabes?, usé ropa que me hacia recordarte y miraba todas tus presentaciones en las pasarelas- dije y la mire

-te necesite todo el tiempo, te escuchaba cantar todo el tiempo en la radio las únicas canciones que tengo descargadas son las tuyas, te extrañe mucho- dijo para luego mirarme

-¿sigues teniendo el anillo de mi madre?- pregunte a lo que ella me miro supuse que no pero colocó su mano izquierda en mi mano y allí estaba el anillo

-puedes sacarlo si quieres después de todo es el anillo de tu madre- dijo ella mirandome

-pero yo decidi dartelo a ti.... porque te amo- dije besando su mano a lo que ella sonrió y me abrazo

-tranquilo esta vez no te dejaré ir- dijo abrazandome fuertemente

-ni yo a ti, ni yo a ti- dije besandole la mejilla

-pero deberíamos ponernos a tono, salir un par de veces y aprender lo que pasamos todo este tiempo para conocernos mejor y hacerlo oficial, para decir que el tiempo en el que estuvimos separados al fin termino- dijo ella a lo que yo asenti para luego tomarnos las manos y mirarnos a los ojos sin decir una sola palabra dejando que nuestro tacto hable por si solo.

Una Promesa Que Lleve En El Corazón (+18) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora