Estaba ayudando a Sugino-Kun con sus bolas rápidas, ya que Koro-sensei le había ayudado a mejorar después de su rara forma de mostrarle como podía mejorar sus potenciales en el juego. Me gustaba ver la cara de Sugino-Kun, ya no tenía frustración o desánimo, sino esperanza y alegría que le había brindado Koro-sensei.
Karma: Nagisa-Kun, ¿puedes venir un momento? Tengo que hablar contigo.
Nagisa: Karma-Kun, voy enseguida. Disculpa Sugino-Kun, seguiremos practicando después, ¿no?
Sugino: Pues claro, no te preocupes Nagisa-Kun, aunque solo ten un poco de cuidado con Karma-Kun, tengo un mal presentimiento de repente. En fin, me voy, mañana seguiremos practicando, ¿de acuerdo?
Nagisa: Muy bien, nos vemos.
Una ves que me despedí de Sugino-Kun, me dirigí hacia Karma-Kun para saber de que se trataba.
Karma: Nagisa-Kun, ¿podrías venir conmigo al armario de deportes?
Asentí y empezamos a ir rumbo al cobertizo, estaba un tanto oscuro y tanto afuera como adentro, no se escuchaba nada, era un gran silencio. Karma-Kun sacó unas cuerdas rosadas un poco delgadas y me amarró con ellas arrastrándo me hacía él como si me hubiera atrapado, la soga estaba bien sujetada y su agarre me hizo caer sobre él como si no tuviera fuerzas.
Karma: ¿Y bien? ¿Qué te parecen las cuerdas?
No podía contestar, me quedé helado al estar tan cerca de Karma-Kun, casi mirándolo de frente a frente que parecía que nos daríamos un beso, sin embargo Karma-Kun me desató y me dio la cuerda.
Nagisa: ¿qu-qué es esto?
Karma: Es una cuerda que acabó de hacer, esta hecha de material anti-sensei para tratar de amarrar alguna extremidad o hasta atraparlo en una trampa rudimentaria. ¿Por qué? ¿Pensabas qué era otra cosa?
Nagisa: ¿qué? No, solo que quede un tanto sorprendido cuando me atrapaste y me amarrastraste.
Karma: Solo quería probar la resistencia de la cuerda, solo falta probarla en algo más pesado y rápido, así podremos usarla en la siguiente trampa para Koro-sensei.
Nagisa: Ahm, si parece una buena idea Karma-Kun.
Al final salimos los dos del cobertizo llevándonos la cuerda. Me sentía un poco avergonzado por haber pensado de esa manera, y tal parecía que Karma-Kun no se había percatado de mi vergüenza al momento de estar tan cerca de él.
Karma: Hey, Nagisa-Kun.
Levante la cabeza para verlo cuando nos encontrábamos bajando la montaña, me había adelantado un poco, así que estaba enfrente de él. En el segundo en que me volteo a ver, Karma-Kun se acerca a mi cara dejándonos ver de frente a frente a centímetros de tocarnos los labios uno al otro.
Karma: Nagisa-Kun, ¿en verdad piensas de esa manera?
Nagisa: ¿qué?
Karma: Me refiero a tu cara sonrojada hasta las orejas, parece que te gusto.
Nagisa: ¿qué? No-no es verdad, solo..., solo...
Karma: ¿Hmn? ¿Solo qué?
Se seguía acercando más a mi cara sin dejar de verme a los ojos, no podía apartar la mirada de él. Pensé que el mundo se había detenido, no podía dejar de verlo o decir alguna palabra, era como ver a un lobo mirar fijamente a su presa antes de devorar la por completo.
Karma: ¿A casó tienes miedo?
Nagisa: Claro que no.
Karma: ¿hmn?
Nagisa: Intentas intimidar me, pero eso no funcionará conmigo Karma-Kun.
Le dije con una gran sonrisa sin dejar de mirarlo, ahora los papeles se invirtieron, Karma-Kun era el que estaba siendo intimidado ahora.
Karma: Ja ja ja ja, valla que has sabido leerme Nagisa-Kun, estoy impresionado.
Nagisa: Ahm, si. Je je, pensé que por un momento me estaba equivocando.
Tal parece que no era nada ese mal presentimiento, decidí dejar de preocuparme e ir a casa a descansar para asistir mañana a la siguiente prueba de asesinato.
NARRADOR
Mientras tanto, Karma no dejaba de pensar en lo asustado que se veía Nagisa cuando lo amarró con la soga, sin embargo, lo que más le gustó de sus reacciones, fue su rostro de asesino que tiene escondido dentro de él.
Al día siguiente en la clase E, Koro-sensei se llevó una sorpresa de Karma y Nagisa durante su almuerzo cuando le entregaban un dulce al profesor, utilizaron la cuerda para tratar de partirlo por la mitad mientras Nagisa le entregaba el dulce, pero Koro-sensei logró escapar junto con el dulce, desafortunadamente para él, el dulce contenía residuos pequeños en el dulce y en el papel, en el momento en que empezó a comerlo, estaba casi a punto de explotar si no fuera porque solo le provoco dolor de estómago por unos minutos antes de empezar la clase y vomitar por la ventana.
NAGISA
Mientras el día transcurría casi normal, aún con la llegada de la señorita Bitch, todos nos dimos cuenta que hasta los asesinos profesionales tenían sus dificultades para asesinar a Koro-sensei, eso me llevó a una pregunta.
¿Karma-Kun y yo lograremos matar a Koro-sensei?
Tenía mis dudas sobre nuestro equipo, aunque seguía repitiéndome internamente que no tenía que preocuparme, que solo era una vaga idea que tenía sobre nosotros y nuestros planes. Deje de tomarle importancia una vez que vi la demostración de asesinato de la señorita Bitch contra Koro-sensei, supongo que su propio equipo y plan de asesinato original no fueron suficientes para Koro-sensei.
Al día siguiente, la señorita Bitch no dejó sus intentos de asesinato contra Koro-sensei, pero a empezado a darnos clases como una maestra de Inglés. Al principio odiabamos a la señorita Bitch debido a que era muy arrogante, sin embargo ahora la hemos aceptado como maestra en nuestra clase.
Karma: Oye Nagisa-Kun, necesitamos hablar sobre una cosa en privado.
Nagisa: ¿En privado?
Karma: Si, ¿puedes verme otra vez en el cobertizo después de clases?
Nagisa: Su-supongo que si, no hay problema.
Karma: Muy bien, ahí nos vemos.
La mirada de Karma sobre mi, no era como las otras, era diferente. No parecía que me viera a mi sino que era como un depredador viendo a su presa para después atacarla y deborarla, no entendía esta sensación de escalofrío, solo sabía que no era buena señal.
Continuará
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Lección de Asesinos (Karmagisa, Yaoi +18)
Fiksi PenggemarSon dos asesinos con métodos de asesinato muy diferentes, incluso sus caracteres son diferentes, pero las diferencias entre ellos no fueron un obstáculo para que se convirtieran en grandes amigos desde la preparatoria. Ahora se reencontraran muchas...