Cap. 97: Reencuentro

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Janis llegó al departamento y todo estaba como lo había dejado, se sintió melancólica en cuanto entró, así que fue al dormitorio rápido y sacó su maleta para empezar a empacar su ropa junto con algunos objetos personales. Cuando su maleta estaba lista decidió darse una ducha antes de irse... Estando en la ducha recordó las veces que se bañaba junto a Vlad

-Janis: "Está ducha es demasiado pacífica sin él"... *derramando lagrimas* ¿Por qué creí que estaría esperándome? *sollozo* No quería enfrentarlo porque temía que sintiera asco porque otro hombre me había tocado, *apretando sus puños* pero en realidad no fue así... *sonriendo con los ojos llorosos* Debo ver el lado positivo de esto, ahora puedo controlar mejor a Gaia...

Ella terminó de ducharse y salió, se puso una bata de baño y tomó una toalla para secar su cabello; cuando salió del baño sintió un escalofrío recorrer por su espalda y no pudo moverse, dejó caer la toalla con la que estaba secando su cabello y volteó a ver el sofá individual que había en una esquina; la luz estaba apagada y solo logró ver los zapatos del hombre y sus ojos rojos

-Vlad: Miren quién volvió, la fugitiva... *sonriendo molesto* La hija prodiga... No, más bien diría que la esposa prófuga decidió regresar a casa, *poniéndose de pie y caminando hacia ella* abandonaste a tu hombre para ir de aventura a un lugar donde no podría encontrarte *tomando un mechón de cabello para besarlo* ¿Qué tienes que decir en tu defensa? Mi querida esposa

-Janis: Yo... *rechinando los dientes* Lo siento, no debí huir de tí *agachando la mirada*

-Vlad: *poniéndola contra la pared* Me dejaste sin decir una sola palabra *gritando enojado* ¡Te fuiste por dos años! *dando un golpe a la pared*

-Janis: ¡Lo siento! *sin levantar la cabeza* Lo siento mucho, en verdad lo siento...

-Vlad: Regresas después de abandonarme por dos años y lo único que dices es ¡Lo siento! *sujetándole las manos sobre la cabeza* ¿Creés que vas a remediar todo con sentirlo? *besándola por la fuerza*

-Janis: Por favor, deja de usar tus feromonas, *sin verlo a los ojos* haré lo que quieras pero no así, *tragando saliva* por favor Vlad

-Vlad: Está bien... *soltandola y disipando sus feromonas* Ahora dime amorcito ¿Qué harás? *besándola nuevamente* Tus labios siguen teniendo ese sabor dulce que me encanta *sonriendo y tomándola por los hombros*

-Janis: Déjame hacerlo por tí *quitándole la corbata*

-Vlad: ¡No! *molesto* Esta vez no te dejaré tomar el mando

Vlad la hizo voltear para abrazarla por la espalda y le empezó a bajar la bata, le besó su hombro descubierto, luego le mordió el cuello y bebió su sangre, mientras lo hacía uso su poder para ver los recuerdos de Janis y saber la razón por la que había ido

-Vlad: "Me dejaste por una tontería como esa, aún cuando supiste la verdad decidiste quedarte a entrenar, aún cuando me extrañabas tanto no quisiste volver" *lamiendo la sangre que le salía del cuello* Voy a castigarte por dejar a tu esposo solo durante la luna de miel, *sonriendo y dejando caer la bata* no voy a dejarte ir hasta que esté totalmente satisfecho *mordiéndole la oreja*

La tomó en sus brazos y la dejó caer en la cama, luego empezó a quitarse la ropa frente a ella, Janis se sonrojó pero no se atrevía a verlo a los ojos porque sabía que lloraría si lo hacía. Vlad se acostó lentamente sobre ella mientras la penetraba

-Vlad: Estás muy estrecha, *sonriendo* déjame arreglar eso justo ahora *embistiendo con fuerza*

-Janis: ¡Aaah! *cerrando los ojos y apretando el brazo de Vlad* "Eso duele"

-Vlad: ¿Qué pasa? ¿No quieres hacer esto? ¿No extrañabas mis toques y mis caricias? ¿No querías sentir mis besos y escuchar mi voz? ¿No querías verme de nuevo?...

Janis sintió unas gotas caer en su cara y abrió los ojos de inmediato, vió el rostro de Vlad, sus ojos estaban derramando sangre, no pudo contenerse más y lo abrazó mientras lloraba disculpándose por haberse ido por tanto tiempo

-Vlad: Deja de decirlo una y otra vez, *sonriendo* que te disculpes así no hará retroceder el tiempo, *dándole un beso en la frente* no vuelvas a hacerlo... No vuelvas a dejarme solo

Vlad la besó tiernamente mientras seguía tocándola de una forma gentil y apasionada a la vez... Hicieron el amor una vez tras otra hasta que ambos estaban agotados y se quedaron dormidos abrazándose...

Unas horas más tarde Janis despertó y recordó que estaba preparándose para viajar a Rumania, se soltó lentamente del agarre de Vlad e intentó ponerse de pie, sus piernas y cadera le dolían, pero aguantó el dolor y empezó a cambiarse; cuando iba a ponerse la blusa se le resbaló de la mano y la recogió, pero al levantarse vió a Vlad en el espejo, él estaba parado tras ella...

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Amor, pasión y sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora