Cap. 101: Soy tu esposa

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-Janis: *sonriendo* Puedo darte amor

-Vlad: Eso me agrada, *tocándole los labios* concedere tu deseo, solo espero que no te enojes cuando despiertes por la mañana...

Vlad fue a otra habitación para separar su cuerpo y dejar al conde durmiendo, luego se dirigió a su habitación, en cuanto entró empezó a desvestirse y cuando llegó a la cama Janis lo estaba esperando desnuda, con una ligera sábana cubriendo su cuerpo

-Vlad: Creo que no estás tan ebria como creí, *sonriendo* voy a divertirme mucho... *arrebatándole la sábana para acostarse sobre ella* La otra ocasión intenté contenerme porque no quería lastimarte, pero está vez tú me lo has pedido, y encima me provocas de esta manera *besandole el cuello*

-Janis: No tienes que contenerte ahora *lamiendo uno de sus cuernos*

-Vlad: ¿Qué haces? *sonrojado* Nadie nunca se ha atrevido a tocarme los cuernos, *sonriendo* pagarás muy caro tu atrevimiento

-Janis: Soy tu esposa y puedo hacer lo que quiera *tomando su rostro para besarlo*

-Vlad: Recuerda bien... *mirada lujuriosa* Tú lo pediste...

Empezó a penetrarla con rudeza mientras la besaba apasionadamente y jugaba con sus pechos... Al siguiente día cuando despertó Vlad la estaba abrazando y estaba profundamente dormido, ella se levantó y se duchó, luego bajó para cocinarle algo, Rich estaba desayunando

-Janis: Rich... ¿Por qué Vlad no puede alimentarse cuando está unido al conde?

-Rich: Es como un pacto o algo así, *pensativo* debe beber sangre para que el conde se mantenga con vida... A decir verdad, el conde tiene las orejas puntiagudas y los ojos rojos cuando se separan, pero el jefe mantiene su físico de siempre

-Janis: Ya veo, por cierto ¿Dónde está el conde?

-Rich: Salió a dar un paseo con Pluto

-Janis: ¿Puede hacer eso? *confundida* Me refiero a salir durante el día

-Rich: Bueno, cuando se separan él es un humano común y corriente, el único problema es que el jefe se descontrola un poco

-Janis: ¿Se descontrola?

-Rich: Sus alas y cuernos salen en cualquier momento, no puede camuflarse entre los humanos

-Janis: *sonriendo* Entonces puede separarse al menos mientras está en casa ¿Cierto?

-Rich: Si... Eso creo... *dudando* Señorita ¿En qué está pensando? "Seguro está pensando en algo pervertido, son tal para cual"

-Janis: Nada *riendo*...

Cuando Janis estaba terminando de servir la comida para Vlad, el conde y Pluto llegaron con una caja de repostería; en cuanto el conde la vió le dió los buenos días luego fue hacia ella y la abrazó, le dijo que se alegraba de verla de nuevo, ella se quedó en silencio volteando a ver a Rich quien sólo lo veía sorprendido. Vlad entró a la cocina y se puso celoso al ver la escena, tanto que sus alas salieron derrepente haciendo que una silla cayera al suelo

-Vlad: ¿De dónde vienen ustedes? *intentando ocultar su molestia*

-Conde: Salimos a caminar con tu sirviente, *soltando a Janis* él dijo que a... Janis, le gustaban los postres

-Janis: Si no han desayunado, puedo servirles algo

-Conde: Gracias, pero comimos antes de salir *sonriendo tiernamente*

-Janis: Entonces... Vlad, ven a desayunar conmigo

Vlad se sentó a comer con ella mientras los demás se fueron a la sala, Pluto preparó palomitas y pusieron al conde a ver películas, estaba intrigado por los aparatos modernos; mientras tanto Janis y Vlad hablaban sobre lo que él había hecho durante ella estuvo entrenando, él le contó que su padre necesitaba rejuvenecerse cada cierto tiempo y él tuvo que hacerce cargo del infierno mientras Lucifer estaba ausente; pasó un año y medio cumpliendo con su trabajo hasta que su padre regresó, cuando volvió a la tierra siguió trabajando para Amelia

-Vlad: Por cierto, voy a cambiar tu sello, *sonriendo* como pago, el viejo me dió algunas perlas de sangre así que tengo más poder ahora

-Janis: ¿Esas cosas son tan importantes? *pensativa* Recuerdo que te dió una como regalo de bodas

-Vlad: Si, lo son, *encogiendo los hombros* no todos los días podemos conseguir sangre de ángeles para incrementar nuestro poder

-Janis: *sorprendida* ¡¿Sangre de ángel?!

-Vlad: Si, él hizo las perlas que tiene con la sangre de los ángeles que murieron en la segunda guerra contra los nuestros

-Janis: ¿No han pensado que ellos talvez hagan los mismo con la sangre de ustedes?

-Vlad: Nuestra sangre está maldita, ellos prefieren eliminar por completo nuestra existencia y enviar al infierno a aquellos que no puede extinguir

-Janis: ¿Y lograste averiguar tu nombre?

-Vlad: *confundido* ¿De qué hablas?

-Janis: Tu madre era humana y viviste un tiempo con ella, debió nombrarte cuando naciste... Los humanos normalmente piensan en el nombre de sus hijos antes de darlos a luz

-Vlad: *sonriendo* Me gustó tu comida, voy por el conde ahora *levantándose de la silla*

-Janis: *mirada lúgubre* Aún no has contestado mi pregunta

-Vlad: Si, hice un trato con padre, le dije que si me decía mi nombre cumpliría como su sustituto...

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Amor, pasión y sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora