CAPITULO 14

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C: Hoy te lleve al purgatorio pero esta vez pienso llevarte al cielo.

V: Suena tentador, bueno pasa a buscarme a las 10.

C: No se diga más (se acerca y le da un apasionado beso) No sabes lo mucho que deseaba tenerte así, poder admirarte y besarte.

V: ¿De verdad? Porque yo sentía que si no te besaba moriría.

C: Te lo juro, era como esa desesperación que uno siente cuando no bebe agua (mirándola con ternura) Bueno paso por ti más tarde.

V: Esta bien, te esperaré.

Se vistieron para después despedirse con un gran beso lleno de amor y felicidad. Podían sentir esa felicidad con cada parte de su cuerpo, sus besos, sus caricias, sus ojos que se gritaban mil cosas. Cesar no podía creer que esa mujer le correspondiera, esa mujer tan perfecta, tan divina, tan real, moría por sentirla suya, por volverse uno mismo con ella. Victoria por su parte sentía un gran alivio pero a la vez estaba muy sorprendida por lo que se atrevió hacer, no daba crédito a lo que estuvo a punto de pasar en su camerino, ella siendo tan pudorosa, se atrevió a tal cosa. Pero es que ese hombre no merecía menos, le encantaba aquel hombre por el que muchas desearían estar en su lugar. Pero menos podía creer que tendría una cita con él esa misma noche.

●Más tarde en el estacionamiento●

C:(al teléfono) Hola, su transporte rumbo al cielo la esta esperando.

V: (riendo) Más que lista para ir al paraíso, en un momento bajo, estoy terminando de arreglarme.

C: Mujer si tu no necesitas nada de eso, a mi me fascinas natural tal como luces.

V: Es más para sentirme cómoda yo misma, no se adorne Señor Evora, y ya voy no te desesperes que más me tardaré. (Cuelga)

C: (mirando el celular) Va, me colgó, no cabe duda que me encanta la picardía de esta mujer.

Al pie de las escaleras en el estacionamiento●

V: (mirando hacia los lados buscando el carro de Cesar)

P: Hola Bonita (sorprendiendola por detrás)

V: (se sobresalta) Ay Pablo me asustaste, ¿qué haces aquí tan tarde?

P: Mi llamado va terminando y ya me pasaba a retirar cuando venía bajando y te vi. ¿Esperas a alguien?

V: No... Bueno si, a que pasen por mi.

P: Si quieres yo te llevo, no tengo ningún problema, aparte que me encantaría pasar más tiempo contigo bonita. (Acercándose a ella)

V: No gracias, que amable Pablo pero van a pasar por mi, ya no deben de tardar te lo agradezco pero no. (Nerviosa)

P: Bueno bonita, pero me la debes porque ya hace rato que quiero platicar contigo y te me haz escapado.

V: No he tenido tiempo Pablo no pienses mal, pero luego no te preocupes. (Sonriendo desesperada porque ya se fuera)

C: *Viendo como Pablo no la dejaba en paz, no le gustaba para nada verlo cerca de ella, sabía lo que el quería y de imaginarlo se le retorcía el hígado, tenía ganas de bajar y correrlo pero sabia que Victoria se enojaria con él y perdería su cita y por nada del mundo correría ese riesgo, no le quedaba más que esperar*

P: Bueno chiquilla te dejo porque mañana tengo mi llamado muy temprano y quiero dormir lo suficiente, cuidate y me saludas a Pepe Lalo (riendose)

V: (mirándolo muy enojada) ¡NO LE DIGAS ASÍ! (Dandole un manazo en el hombro)

Él Contrato Del PecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora