Ruggie

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Era un bonito día, el clima era perfecto y el cielo estaba despejado, cada estudiante de Night Raven College llevaba a cabo sus respectivas clases a no ser que estuviese en su tiempo libre

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Era un bonito día, el clima era perfecto y el cielo estaba despejado, cada estudiante de Night Raven College llevaba a cabo sus respectivas clases a no ser que estuviese en su tiempo libre. Cierta muchacha se encontraba observando con una expresión neutra algunas pequeñas flores las cuales habían crecido en los verdes campos de la institución, sin tomarle mucha importancia a lo que sucedía en su entorno, pues parecía estar sumergida en su propio mundo.

Pronto un joven de cabellos rubios se acercó a ella curioso, pues era la primera vez que la veía de esa forma tan... ¿distante?

Se posicionó a su lado en cuclillas, notando casi de forma inmediata que ella no había ni reaccionando a lo que había hecho. Llevó una de sus manos frente al rostro de la chica, agitándola suavemente para ver si sacaba a su amiga de su mundo de los sueños; y lo consiguió, la fémina elevó sus cejas y volteó su cara para poder verlo, con una expresión un tanto confundida e incluso alarmada.

Esbozó una pequeña sonrisa para su amiga, el de ojos cerúleos─. T/n-chan, ¿Qué sucede? ─Ladeó hacia la izquierda su cabeza, a la par que se sentaba en el césped, justo al frente de las pequeñas flores conocidas como dientes de león. Sabía muy bien que no había mantenido muchas conversaciones con esa muchacha, pero de alguna u otra forma sentía que algo no estaba bien con ella, y quería averiguar qué ocurría.

Por otra parte, al recibir la pregunta del de Savanaclaw no supo cómo reaccionar más que regresar su vista a las plantas de color amarillo─. Cosas... No es nada. ─Esas palabras no convencieron del todo al chico, quien frunció su ceño y soltó un suspiro, buscando algunas palabras para alargar la conversación entre él y la de baja estatura.

Una brisa se llevó las corolas de algunas flores, esparciéndolas por el campo, llenando al mismo con unas diminutas motas de color blanco─. Si no fuese nada no estuvieses así. ─No solía tomar muchas cosas de forma seria, pero al ser ella una persona a la cual poco conocía prefirió quedarse a platicar con ella, quizás a sacarle una sonrisa─. Digo, eres diferente cuando hablas con tus amigos, la mayoría de veces... Pero ahora estás rara. ─Apuntó a la chica con uno de sus dedos índices, volviendo a mirarla.

Ella suspiró con una expresión nula en su rostro, sin voltear a ver a su compañero por una segunda vez. El ambiente se volvió un poco tenso, al no recibir alguna palabra por parte de la muchacha la cual continuaba observando a las flores como si fuesen lo único interesante en aquel paisaje─. No tienes por qué preocuparte, en serio. Ya se me pasará. ─El rubio bajó sus orejas un par de grados, cada vez más decepcionado por las respuestas que le brindaba la fémina, pues no le eran de mucha ayuda.

─ Pero no me gusta verte así, con esa cara no te vez bien. ─Confesó cruzando sus piernas, apoyando en una de ellas su brazo, para reposar en él su cabeza, manteniendo su vista hacia la joven.

Por un breve momento se le ocurrió usar su magia única con ella, para hacerla reír un poco; después de un par de minutos descartó esa opción, pensando que quizás la incomodaría si hacía eso. Rascó su cabello como si de alguna forma eso le ayudara en algo, un par de segundos antes de volver a abrir la boca.

─ No sé qué te esté pasando para que te sientas así, pero me gustaría que supieras que todo tiene un inicio y un final, al igual que estas emociones. ─No quería decir algo que no debía, así que se le ocurrió que lo más sabio sería darle algunas palabras para que se sintiera mejor, aunque fuese un poco─. Además, te vez genial con una expresión alegre... ¡Como esta! ─Esbozó una amplia sonrisa, mostrando sus dientes.

La chica lo observó aún sin cambiar ni un poco su rostro, sin decir algo. El semi-hiénido refunfuñó notando que no había progresado nada en aquella conversación, así que usó su último recurso, por más que no le saliera bien lo que estaba a punto de realizar.

─ De verdad que eres complicada... Laugh with me! ─Usó al final su magia única, riéndose para hacer que la fémina imitara sus gestos, sin escapatoria alguna.

─ He-Hey, ¿Qué hiciste...? ─Las palabras salieron con dificultad de la boca de la confundida muchacha, quien ahora sonreía y soltaba pequeñas risas; todo lo contrario a como se comportaba minutos atrás.

Él rió más al ver que la de baja estatura se encontraba perpleja, sin darse cuenta que se encontraba bajo los efectos de su magia única. Al pasar unos cuantos minutos Ruggie dejó de hacer que ella imitara sus movimientos, haciendo que la joven lo observara un poco sorprendida.

─ ¿Ves?, Se siente mejor reírse que estar triste. ─Mantuvo una sonrisa en su cara, elevando sus orejas con alegría. Quizás se había ganado completamente la amistad de la chica o tal vez empeoró la situación, pero al menos la había visto feliz desde cerca, por primera vez.

─ No tenías por qué hacer eso... ─Ella lo observó con un suave sonrojo en sus mejillas, poco notable. Incluso portaba ahora una pequeña sonrisa, aunque pasaba desapercibida para el de ojos azules, ahora.

Notó las mejillas rojas de la chica, y pensó que había hecho lo correcto─. Me gustaría que confiaras un más poco de mí, así quizás hablaríamos más, y no tendría que platicar siempre con el aburrido Leona. ─Murmuró entre dientes lo último, recordando que debía de llevarle el almuerzo al líder de dormitorio antes de que fuese muy tarde─. En fin, me tienes si me necesitas algún día.

Ella asintió manteniendo esa diminuta sonrisa, la cual no tardó en expandir al escuchar las últimas palabras pronunciadas por el muchacho que se encontraba a su lado. Él no tardó mucho para darse cuenta de ese gesto, riéndose un poco para luego contemplar las flores frente a ellos con una sonrisa; esa conversación no había ido tan mal, después de todo.

 Él no tardó mucho para darse cuenta de ese gesto, riéndose un poco para luego contemplar las flores frente a ellos con una sonrisa; esa conversación no había ido tan mal, después de todo

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buenasbuenas, perdón por tardar mucho en actualizar.

¡ este escenario lo hice con mucho cariño para -platino !, hace poco se sentía mal y me pareció bonita la idea de que podría escribirle algo para que cada vez que se sintiese así lo leyera y quizás sonriera aunque fuese un poquito. 👉👈

espero que te haya gustado, bú.

Postmortem : Twisted WonderlandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora