Celos [JiCheol]

♡•DOS•♡

Borré esta parte por error y volví a subirla xd
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Aquella noche no fue la única vez en la que terminaron en un motel, habían tenido tan buena química y se sentían tan atraídos el uno por el otro que continuaron viéndose. Al principio sólo fueron encuentros sexuales, no siempre tenían la oportunidad de verse y tener una cita, pero cuando se daba, terminaban en una cama. Poco a poco fueron dejando los moteles, para terminar en el departamento de alguno de los dos, era mucho más cómodo e íntimo, además de que podían pasar la noche sin preocupaciones.

Esos encuentros también les daba la oportunidad de conocerse, a veces conversaban entre cada ronda, o al terminar, comenzaban a hacerse preguntas un poco más personales para irse conociendo o hablaban de cualquier tema que se les viniese a la mente. Fue así como poco a poco se dio la relación hasta que después de ocho meses, Jihoon le pidió a Seungcheol que se hicieran novios, obviamente el pelinegro aceptó, no sólo se trataba de sexo, había sentimientos involucrados y los dos se amaban con locura.

Luego de dos años y unos cuantos meses de noviazgo, decidieron que era el momento de mudarse juntos, aunque en los últimos meses habían tomado un poco de distancia y no se veían tan seguido como quisieran, nada les impedía confiar en el otro y hacer a un lado los celos que de repente en cualquier relación se presenta. Cada uno estaba ocupado con su trabajo, Jihoon tenía un horario laboral un poco jodido de vez en cuando, pero amaba lo que hacía y además recibía una excelente paga; Seungcheol por su parte, trabajaba desde casa, en el horario que le apetecía, pero aun así le consumía sus días. Fue el pelinegro quien pensó que se podían mudar juntos para verse más, aunque fuese sólo por las mañanas y las noches.

—¿Ya tienes empacadas tus cosas, bebé?— preguntó Seungcheol a través de la línea.

Jihoon suspiró —me va a llevar más tiempo de lo planeado cariño, esta semana he llegado agotado de la oficina y son demasiadas cosas las que aún me quedan por empacar.

—Ya quiero que te mudes conmigo— dijo en un tono infantil y con un puchero que su novio no podía ver.

—Lo sé— murmuro —aunque era más fácil que te mudaras conmigo— dejó escapar una ligera risa, recordando la discusión que habían tenido cuando decidieron a qué departamento mudarse, pues SeungCheol había usado el sexo para convencerlo de que fuera él quien se mudara.

—Pero tu departamento es más pequeño y vives en un vecindario aterrador— mencionó sin deshacerse de su puchero.

—No es tan malo, sólo deben arreglar las luces de la calle— se quejó, pero en realidad estaba contento de salir de ese horrible vecindario.

—Apresúrate, ¿sí?

—No lo prometo Cheolie.

—¿Y si voy el fin de semana y te ayudo a empacar?

Jihoon sonrió antes de responder —ven el sábado después del mediodía, así me dejas descansar un poco de mi horrible semana.

—Perfecto— dijo con una amplia sonrisa —llevaré el desayuno... o el almuerzo.

—Lo que sea, al fin y al cabo es comida— rió —nos vemos luego cariño.

—Adiós bebé.

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Al día siguiente Seungcheol fue a las oficinas de la empresa con la que estaba trabajando en esta ocasión, estaba feliz porque ya era viernes y al día siguiente vería a su novio. Entró al lugar y fue recibido por el dueño del despacho, parecía de su edad, seguramente estaría entre los veintiocho o veintinueve años como él, así que se llevaron bien al instante. Hablaron cómodamente, no sólo del trabajo que estaba entregando Seungcheol, sino también de cosas más casuales.