Desde donde estés...

Capítulo 11

Actualidad...

Richie trataba de recordar, quería recordar si el día anterior había desayunado avena o arroz con leche, ¿se había duchado aquella semana?, no lo sabía, sus recuerdos se hacían cada vez más difusos y se escapaban lejos de él.
Creía que era porque no prestaba atención a lo que pasaba o que era un efecto secundario de aquellas medicinas.

Pasado...

Era temprano por la mañana y Richie se alistaba para ir a casa de Ben, tenía que salir temprano esa mañana porque irían a acampar por dos días.
Richie solo tenía que pedirle prestado el auto a su padre e irse, era sencillo, porque sus padres sabían que él estaría con sus amigos.
El padre de Richie contestó entre sueños señalando como bien pudo las llaves para luego darse media vuelta y seguir durmiendo, su madre le recomendó que se cuidara y llevara abrigo e igual volvio a dormirse...
Richie seguía algo somnoliento y estaba a punto de subir al auto e irse sin problemas, pero quería despedirse de Eddie, quería ver si estaba bien.
Quería darle un abrazo a su pequeño y también debia avisarle a Sonia que por dos días no podría cuidar a Eddie.
Entonces se dirigio a la puerta de la casa Kaspbrak, una vez llegó, con los nudillos de sus dedos hizo los habituales tres golpes en esa puerta de madera y se dispuso a esperar a que le abriesen la puerta.
Espero cinco minutos y nadie contesto, así que otra vez otros tres golpes sonaron en esa puerta.
- ¿Señora K?, ¿Eddie? - grito Richie algo nervioso, usualmente no tardaban en salir, pero nadie contestó.
Por un momento creyó que a Eddie ya lo habían llevado a la escuela, pero era imposible, Eddie no entraba tan temprano, Richie se dejó de rodeos y entró por su única entrada segura, la ventana que Eddie siempre le dejaba abierta.
Subió por ese árbol que siempre había trepado y se dirigió a la ventana, entro como siempre en la habitación de Eddie, esperando a ver a un Eddie dormido.
Pero al entrar en la habitación Eddie no se encontraba en su cama.
Richie Tozier sintió como se empezaba a acelerar su corazón y como la respiración se hizo más corta, el aire comenzaba a faltarle.
Sin siquiera pensarlo salió de la habitación en busca de Eddie, no le importaba que diría Sonia si lo veia caminando por su casa a esas horas, algo podría inventarse para safarse de esa situación, solo quería encontrar a Eddie.
Richie bajo por las escaleras y encontró unas hojas esparcidas por el suelo, no se detuvo a ver que eran, no parecían importantes, llegó a la sala y sus ojos no daban crédito a lo que estaba viendo, quizás seguía dormido, quizás no había despertado, deseaba que así fuera...
Empezó a llorar con desesperación, mientras intentaba no vomitar, su estómago le daba vueltas y cubria su boca para no vomitar.
Sonia Kaspbrak se encontraba en ese sillón donde el varias veces se había sentado con Eddie, la mujer tenía dos puñaladas en el pecho y la garganta cortada, la sangre estaba espesa y había inundado gran parte del lugar, era una escena que a Richie lo dejaría marcado, una escena que al cerrar sus ojos siempre estaría ahí.
Era un asesinato a sangre fría y sin piedad.
Richie lloraba sin poder evitarlo y con su mirada buscaba a su pequeño, por fin dio con él, lo encontró a un lado cerca de la puerta acostado con los ojos cerrados... Eddie tenía sangre por todos lados, en su rostro, en sus manos, en su pijama...
Llegó hasta él menor esquivando la sangre, quiera verlo o no, esa era una escena del crimen y podían culparlo...
Richie tomó a Eddie entre sus brazos, Eddie respiraba, más no despertaba, la sangre no era suya, Richie busco por todo el cuerpo de Eddie pero no encontró ninguna herida, el menor estaba bien, Richie inspeccionó por todo el lugar con la vista  y vio el cuchillo que había acabado con la vida de la mujer a pocos metros de distancia.
Eddie no despertaba.