FOR LIFE N' DEAD| JASPER HALE

【０５】

𝒮𝓊 𝓇𝑒𝓈𝓅𝒾𝓇𝒶𝒸𝒾ó𝓃 𝑒𝓇𝒶 𝓁𝑒𝓋𝑒 𝓎 𝓉𝓇𝒶𝓃𝓆𝓊𝒾𝓁𝒶, totalmente ajena a todo lo que estaba pasando a su alrededor, a todos los sentimientos y personas que la gente junto a ella tenían, Bella estaba dormida placidamente en el coche de regreso a Forks,  en una posición que se veía incomoda, y que seguramente lo era, pero no importaba realmente, su cuerpo estaba tan cansado que se había desmayado después de que James la hubiera mordido en el salón de baile de su infancia, Bella no tenía conocimiento alguno de lo que había pasado en los momentos después de haber caido en la inconciencia, ella no estaba enterada de nada, de todas las acciones que hicieron los vampiros que ahora la observaban relajarse, sin tener la más minima idea de lo que todas sus desesperadas y aventuradas decisiones habían ocasionado, sin el más minimo conocimiento de lo que los ojidorados habían hecho para protejerla, no era consiente de nada.

Afortunadamente.

Sus delgados y blanquecinos dedos estaban apretados al delgado sueter color vino que Alice le había colocado, tratando de proteger su humano y delicado cuerpo contra el frío, siempre habían estado haciendo lo mismo, protegiendola de todo y todos los que vieran como una amenaza, estando inmediatamente despuestos a poner todo lo que conocían y tenían en peligro para que ella pudiera estar sana y salva, dispuestos a luchar con sus vidas por la de ella, ninguno había dudado tan solo un segundo en dejar a todos atrás para desplazarse a otro lugar y cuidarla, ni siquiera habían tenido alguna objeción al tener que exponer a Jasper a estar rodeado de multiples humanos con la sola idea de que el peleara, sin llegarles a alterar aunque fuese un poco el que se pusiese descontrolar y exponerlos a todos, nada les importaba, por que debían estar ahí para proteger a Bella, pareciera que todo giraba al rededor suyo, desde que el castaño menor se había enamorado de ella pareciese que el mundo de los Cullen's se centraba en su mera existencia, Bella ero lo más importante para ellos después de muchos siglos.

Los Cullen's amaban a Bella con todo su muerto corazón.

Pero eran solo los Cullen's.

En el caso de aquellos que llevaban el apellido Hale, las cosas eran realmente diferentes, eran el polo opuesto de todo lo que su familia pensaba, ellos no la adoraban e idolatraban, ellos no la veían como la humana que había llegado a cambiar sus vidas para mejor, la verdad era que solo la veían como una humana más, puesto que para ellos era eso, Bella ante sus ojos no tenía nada de especial más que la rara habilidad que parecía poseer inconsientemente de manejar al más joven de todos ellos, puesto que aún con toda la fachada de santa que le habían puesto todos los demás del clan olimpíco a nadie se le escapaba que todo lo que dijera Bella resultaba ser ley para Edward, el estaba perdidamente encantado por su tua cantante, estaba también, debidoa eso totalmente cegado sobre todas sus acciones y lo que estas costaban para las personas cercanas a el, algo que le molestaba a los Hale, pero que realmente enojaba y desesperaba de formas realmente peligrosas a Rosalie.

Rosalie era la unica que no ocultaba su desagrado por la humana, inclusive se lo había dicho en la cara la primera vez que la conoció formalmente, cuando Edward la había invitado a comer y ella les había dicho que no tenía hambre sin siquiera darse la molestia de mirarlos o disculparse por su falta de tacto, era una vulgar y Rosalie la odiaba con toda su alma, ella jamás la aceptaría como parte de la familia.

Todos estaban divididos en sus opiniones sobre Bella, y lo peor de todo es que ninguno hablaba sobre ello, callándoselo y fingiendo que todo estaba de maravilla.

Edward apretó fuertemente el volante una vez que estuvieron estacionados atrás del hospital de Forks, frunció su seño y volteo a ver a sus hermanos sentados, estos se encontraban viendo a cualquier lado que no fuera el o la humana, totalmente incomodos, de esa forma había sido todo el viaje desde lo que habíam hecho en el salón de baile, ninguno estaba dispuesto a habalr con el otro, o tan siquiera no con el, durante el momento, o durante un buen tiempo, dependía de la velocidad con la que digerieran el hecho de lo que había sucedido, apretó fuertemente sus rojizos y delgados labios, tratando de no hablar y arruinarlo todo, pero como era tipico de el y su gran boca, de dejo llevar por todas sus emociones y mal caracter, terminando solo con arruinar más el animo de su familia.

— No es nuestra culpa — Edward supo lo que sus hermanos estaban pensando por medio de su don, no habían dejado de repetir la misma frase durante todo el camino.

Es nuestra culpa, todo a sido nuestra culpa.

— El busco ese resultado por su cuenta— habló, escuchandose ronco por las horas de tanto haber estado callado, y aún más por los amargos sentimientos que tenía al decir todo eso — el sabía que Bella es mi pareja y aun así... aun así el hizo todo eso, llevandonos a no tener otra solución más que acabar con el — durante todo el tiempo que hablaba veía las copas de los verdes arboles moverse a causa del viento, distraido— no es nuestra culpa — repitió.

El silenció fue más duro que antes, o tal vez el lo sintió de esa forma después de haber hablado y que nadie lo viera, o se dignara a contestarle, la mente de sus hermanos estaba en blanco, nadie tenía un solo pensamiento adrede, para que Edward no empezara a invadir su privacidad.

— Tienes razón— la voz de Emmett resonó dura, varios tonos más grave que lo que normalmente era, sentenciando una verdad, no era su culpa — Todo esto, toda esta situación, todo lo que hemos hecho por Isabella, nada es nuestra culpa — Isabella, el nunca la había llamado así, siempre lo había hecho con algún diminutivo o un apodo extraño, su voz tampoco había sido alguna vez tan molesta en el tiempo que llevaba conociéndolo, el no era así.

Jasper sintiendo las emociones que Emmett le transmitía se apresuró a quitarle el seguro a la puerta, abriendola y bajando del auto, dejando bajar a una Alice preocupada, temía saber lo que venía, era demasiado obvio lo que el pelinegro estaba a punto de decir, pero aún así no lo detuvo, algo dentro suyo le decía que era necesario, por fin era necesario.

Bajo del coche y cerró la puerta perdiendose en el bosque junto a Jasper, no querían estar presentes cuando Emmett soltará la bomba que todos llevaban guardando a toda costa, no estaban emocionalmente listos.

— Edward — Emmett alzó su vista y la enfocó en el rostro del contrario, una mirada que lo dejo perturbado, estaba cargada de astio y rencor — No es nuestra culpa, si no tuya, solamente tuya.

Y a paso rápido se perdió en el bosque, dejándolo con mil pensamientos y un solo sentimiento.

Culpa.