FIGHT LIKE A GIRL

MIERDAS.

Abro los ojos poco a poco y noto que algo me está aplastando. Giro la cabeza y me encuentro a Scott encima mío. Dios, como pesa.

-Scott.- le llamó suavemente. - Scott. - alzo un poco más la voz. - ¡Scott! - grito al ver que no se despierta.

-Cállate ya pesada, déjame dormir. - dice aún con los ojos cerrados y adormilado.

Joder me está aplastando. Le empujo para que se quite de encima mío y cae al suelo; lo cual hace que se despierte de golpe y que luzca desorientado.

-Joder Andrea, como te odio. - dice molesto. - No sé ni para que deje que te quedases aquí.

Eso me cabrea. Me cabrea mucho. Con todo lo que me dijo ayer por la noche no me creo que me diga esto ahora.

-¿Ese comentario lo has dicho enserio? - le pregunto con los dientes apretados por la rabia. Ojalá diga que no.

-Umm. - se hace el interesante. - Si. La verdad no sé porque te quedaste, tu hermano y sus amigos llegaron con Reese dos horas después, podrías haberte quedado esperándoles. - dice tranquilo.

-¿Me estás vacilando? - le pregunto enfadada. - Eres un payaso. Eres un puto payaso de mierda. - el se queda sorprendido ante mis palabras.

Rápidamente cojo mi ropa, me visto, y me voy.

Mierda, no tengo la moto. Tendré que ir andando.

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Después de media hora andando, por fin llego a casa. Voy a abrir la puerta cuando me voy cuenta de que no tengo llaves. Habrá que llamar a Reese.

Cojo el móvil y marco el número de Reese.

Llamada telefónica con Reese.

-Andrea, ¿que quieres? - pregunta adormilada. Posiblemente la haya despertado.

-Ayer me tuve que quedar en casa de Scott a dormir porque se me olvidaron las llaves, lo cual significa que ahora mismo no las tengo y necesito que alguien me abra la jodida puerta. - le digo cansada.

-Joder, ¿y tengo que bajar a abrirte? - dice exasperada.

-Si, y baja rápido que tengo frío.

-Vale, ahora voy pesada. - dice suspirando.

Y cuelga.

Oigo unos pasos detrás de la puerta y se que por fin podré subir a mi habitación a ducharme y a comer algo.

La puerta se abre y no me encuentro a Reese, me encuentro a Pablo. Sigo enfadada con él, no entiendo la puta escenita que me montó ayer cuando Scott me quería traer a casa.

-¿Que haces aquí? - le pregunto enfadada. - ¿Por qué cojones Reese no ha bajado? - me ceño se frunce y él me mira confundido.

-¿Cómo que que hago aquí? - hace una pausa para analizarme. - Reese me ha dicho que querías que bajase yo para poder hablar conmigo sobre lo que paso ayer.

VOY A MATAR A REESE.

-Pues eso es mentira, yo contigo no quiero hablar para nada. - le espeto enfadada.

-Venga Andreita, dame un abrazo, y después vamos a hablar - me dice en tono triste.

-¿Un abrazo? - le miró de arriba a abajo con cara de asco. - A ti no te doy ni agua. - le paso por un lado chocando hombro contra hombro y subo corriendo a mi habitación.

Entro a mi habitación, me quito la ropa rápidamente y me meto a la cama a dormir.

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-Uf que grande, eso no me va a entrar. - digo mirándola fijamente.

-Que si Andrea, que esto si entra. - me dice Iñigo.

-Que no joder, que esa jeringa es muy grande. - le digo asustada.

-Venga hermanita, te han apuñalado muchas veces y ¿tienes miedo a una jeringuilla de nada? - el amigo pelirrojo de Reese (del cual no me acuerdo su nombre) se voltea a verme incrédulo.

-¿Qué pasa? ¿Por qué me miras así? - pregunto extrañada.

-¿Cómo que por qué te miro así? - abre los ojos como platos. - Acaba de decir tu hermano que te han apuñalada muchas veces.

-¿Y? - le miró de arriba abajo. - ¿De dónde te crees que han salido todas las cicatrices que tengo? - le pregunto con una ceja alzada.

Se queda pensativo y Reese decide cambiar de tema.

-Oye Andrea. - me llama Reese. Le hago un asentamiento con la cabeza para que prosiga. - ¿Has hablado con Scott después de la fiesta? Es que hace un par de días que no le veo. - al escuchar su nombre me tenso.

-Em...- me pienso bien que responder. - No, no sé nada de él desde la fiesta. - contestó con fingida despreocupación.

La verdad es que si he estado pensando un poco en Scott estos días. No sé porque pienso en él, sinceramente. Solo es algo que me da vueltas en la cabeza. No sé porque de repente se enfadó tanto. Será bipolar o algo.