Bunny Hunt °Katsudeku°

Confianza y celos

Se sentía incomodo entre las sábanas, la humedad le era incomoda y estaba todo pegajoso. Los rayos del sol se empezaban a ver a través de las cortinas. Abriendo los ojos poco a poco para adaptarse a la luz, se da cuenta que se siente mojado, por un momento se le atravesó por la mente que se había meado encima de la cama. 

Con un bufido molesto se levantó de esta con intención de revisar que no haya pasado, porque aparte de los vómitos, esto sería de lo más vergonzoso, aunque no recordaba no haberse levantado a vomitar, así que por lo menos ya era un avance. 

Grande fue su sorpresa cuando vio que no había vomito, ni orina, sino una gran mancha de sangre en las sábanas y en su pijama, más que todo en la camisa, su cabello y su rostro. Esta sangre no era como la que él vomitaba, era como si hubiera aplastado un animal o una bolsa de sangre recién sacada, no había coágulos ni restos de saliva, ni comida. Se paralizó al ver la escena, no le cabía en la cabeza que había pasado. Cayó hacia atrás intentando controlar su respiración y sin quitar la vista de su cama, se rascaba la cabeza con miedo y horror.

- ¿Q-qué de-monios? - logró articular en su shock todavía.

Ahora que se daba cuenta, se estaba lastimando la cabeza en lo que se rascaba. ¿Rascaba? ¿Con que uñas? si ayer se le había caído todo. 

No tenía ni las vendas, en efecto tenía sus uñas en su lugar como si nada hubiera sucedido, es más, lo único raro era que en el comienzo de estas se podían ver unas pequeñas venitas negras, eran un poco más gruesas también.

- ¿Cómo? si ayer incluso Kacchan vio cómo se me cayeron. - En ese mismo instante se cubrió la boca con asombro.

También recordaba lo de los dientes, ¿Cómo los tenía ahora? Levantándose rápido se fue a ver al espejo para confirmar, porque sentirlos no era suficiente. 

Podía verlos a través del espejo, ahí estaban todos con la misma única diferencia que se podían ver en las encías las venas negras.

- Esto no es posible, ¿Qué me está pasando? ¿Qué no me han dicho? - decía incrédulo tocándose los dientes y confirmando que no estuviesen flojos. ¿Abra alucinado todo ayer? ¿Empezaba a perder la cabeza?

Era temprano, así que, si corría a cambiarse lo que traía puesto y las sábanas, quizás nadie lo viera, tendría que correr a la lavandería. A una gran velocidad se cambió, recogió todo, limpio y bajo por las escaleras a la lavandería, con rapidez lo metió y una vez todo listo suspiro un poco más aliviado. Solo un poco, aún quedaba averiguar qué había sucedido.

Subió a su habitación para encontrar más pistas que le dieran una idea de lo que había sucedido, pero todo estaba en su lugar, nada que le diera una pista, no tenía ninguna hemorragia ya que le estuviera doliendo, aun así, se revisó por si no se había percatado. 

Preocupado se le ocurrió decirle a Kacchan, ya que podía confiar en él y sabía que podría contarle más de lo que estaba ocurriendo. Saliendo del cuarto se percató que todos ya empezaban a levantarse así que tendría que apresurarse, bajo por el elevador a la sala principal y ahí vio el espanto. los vio a todos reunirse alrededor de la cocina, algunos llamando a los profesores y otros pálidos cual papel.

- ¿Q-qué es esto? - Preguntaba Jiro mientras miraba la escena.

- Todos mantengan la calma, Aisawa-sensei, All Might y el director vienen de camino. Sé que la situación no ayuda, pero debemos mantenernos atentos a las pistas, aun así, no toquen nada que los comprometa. - Decía un Iida bastante alarmado.

- Pensé que serían simples mapaches, ¡¿LOS MAPACHES COMEN PERSONAS?!- Gritaba Kaminari con horror.

- Por supuesto que no idiota- Se unió a la conversación Bakugo, quien salía justo detrás de Deku, este último se sobresaltó por la impresión - Esto lo ha hecho algo mucho más grande. - decía totalmente serio.