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Vaya día el de hoy, pero ahora finalmente, finalmente Charlie y Vaggie podrían tener algo de tiempo para ellas mismas.
ーEstoy muy orgullosa de ti, Vaggieー. Charlie besó a su novia en la mejilla mientras se acostaban una al lado de la otra.
ーTodavía no siento que haya hecho mucho. Probablemente debería haberme quedado y- ー Sus labios se encontraron con el dedo de Charlie contra ellos, ー¿Hm?
La sonrisa de Charlie por sí sola podría acabar con cualquiera de las preocupaciones de Vaggie. ¿Cómo hacía eso? Algún poder oculto quizá. ーTe dije que ya están mejorando solos... a su manera. No se pueden discutir los resultadosー. El dedo suave presionó aún más contra sus labios, ーY debes saber que aprecio todo tu arduo trabajoー. Ah, esto. Por supuesto, Charlie no podía irse a dormir sin abordarlo.
ーLo sé, cariño. Es sólo que... está en mi propia cabezaー. Vaggie habló suavemente contra el dedo de Charlie. Realmente no quería volver a molestar a su novia. Si empezaba a dejar salir sus propias inseguridades ahora, no podría proteger a Charlie ni al hotel. ー¿Quieres ir a dormir o...ー Ella sintió que había más en esto a juzgar por la mirada emocionada en los ojos de la rubia.
Esa mirada significaba otra gran idea o una noche con muy poco o ningún sueño. O en algunos casos ambos, uno tras otro.
Charlie se inclinó para darle un largo beso. La segunda opción entonces. En su beso, Vaggie acercó a la princesa a su regazo y sus manos se enredaron en el cabello rubio de la chica. ーMe encanta cuando te sueltas el cabello.
ー¿Sí?
ーMhm. Está haciendo algo de calorー. Sus manos desabrocharon el pijama de Charlie poco a poco hasta que pudo presionar su cara contra su cálida piel blanca. ー¿Qué quieres que haga por ti esta noche, hermosa?
ーEn realidad... tengo algo que quiero probar. Algo nuevoー. Charlie habló en voz baja, saliendo de la cama y sacando algo del armario.
¿Nuevo? Oh, Vaggie tenía que ver esto.
ーEn ese club de BDSM en el que estábamos, volví con Angel y Husk. ¡Pero no te preocupes, los mantuve a raya!ー Vaggie frunció el ceño preocupada. Que esos dos estuvieran en la conversación no era exactamente lo que le preocupaba. ーNo fue tan malo una vez que no intentaron involucrarme. Por alguna razón, las personas ahí fueron muy insistentes.
ーProbablemente porque eras la persona más atractiva allíー. Vaggie susurró para sí misma mientras observaba a Charlie abrir una caja. La princesa levantó el objeto frente a ella. ー¿Un listón?
ーUna cinta bondage. Se veía bonita, me recordó la cinta que llevas en el cabelloー. Charlie pasó los dedos por la tela de seda. ーSé que este tipo de cosas no suelen ser lo mío, pero lo que dijo Angel sobre los vínculos me hizo pensar.
