Se oía un llanto, no un llanto desmesurado sino el de un niño pequeño que no llegaría a los cuatro años, quise ir pero Gerard me freno
-Anne, estas segura?-Gerard, no sabemos qué pasa, igual hay un niño en peligro
Me cogió de la mano y fuimos los dos
Vimos a lo lejos un bulto entre la oscuridad, del que se oía un llanto desmesurado, me solté de la mano de Gerard y fui hacía el
-Hola, dije en tono suave, levanto la cabeza y me miro, unos ojos azules se encontraron con los míos
-Hola, me dijo la pequeña y me dedicó una amplia sonrisa, ahí me enamoré sin saber su nombre supe que nunca me iba a olvidar de esa niña
Gerard se acercó y le preguntó,
-¿Que haces aquí pequeña?-Mi mamá me ha dejado aquí, me ha dicho que no me quiere y que ya no sirvo para nada
Rompió a llorar, y a mi se me rompió el corazón
Deseaba proteger a esa niña de todos los males-Hey! Ven aquí no llores quieres venir con nosotros, la niña asintió
Tenía frío, Gerard se presentó-Soy Gerard, ¿Como te llamas?
-Me llamo Elba contestó la pequeña pelirroja
Gerard la cogió en brazos y fuimos hacía un supermercado cercano para comprar alguna cosa para ella