Entre yo, compre un pijama, un peine y un chocolate ya que durante el camino nos había dicho que le encantaba salí y le ví cogida de la mano de Gerard hablando, se había soltado muy pronto y eso me encantaba, no podía dejar de pensar en la manera en la que esa niña podía formar parte de nuestra vida.
Llegamos hasta casa,-Donde estamos?, pregunto ella
-Esta en nuestra casa cariño, le respondió Gerard
-Te gusta? Le dije yo,
-Me encanta dijo ella
Gerard se bajo hasta su nivel
-Quieres que te prepare una sopa mientras Anne te ducha?-Si! Me encanta la sopa dijo riéndose
La lleve al baño y la bañe mientras Gerard preparaba la sopa con la receta de su madre
Elba me hablo mucho, me dijo que su madre siempre le decía que fue un error, que nunca había llamado mamá a nadie, que su padre le pegaba continuamente y que su abuela se reía de ella cada vez que lloraba por algo
En ese momento me jure que esa niña que me estaba regalando su confianza nunca iba a volver a su familia biológica, a menos que ella quisiese, me jure que iba a ser la pequeña más feliz del mundo