Siento Que Me Gustas /-Killua X Male Reader-

55. Agua del canal

Kizuato

Ya que yo había pagado por adelantado apenas terminamos de comer pudimos dejar el local.
Me sentía cansado, y me dolía la garganta por la molesta mezcla de ataque de risa y vómito que había tenido por culpa de esa maldita mujer.

Sin duda alguna era una de las peores personas con las que me había enviado mi padre a pagar deudas. Tenía un fetiche con las "mascotas", pero no en el sentido zoofilico, más bien en el sentido en que te va a tener con un collar de castigo eléctrico y una cadena puestos mientras te obliga a caminar a cuatro patas con un maldito tapón anal metido que tiene una cola de perro falsa pegada a él. Claro que mientras estuve con ella solo podía comer y beber de unos tazones en el suelo...o de su maldita mano.

Ah, y que por si fuera poco si decías alguna cosa que no fuera "woof" o demás sonidos asociados con los perros te ganabas un fuerte shock eléctrico en el cuello por parte del collar.

Y por supuesto que Lady y Miles no eran otros que sus dos "mascotas" permanentes, con las que me ví obligado a "jugar" el par de veces que tuve que ir a su estúpida casa.
Me dan náuseas sólo de pensar en eso, pero mira que insinuarme que llevará a Killua y a Gon para que vieran eso...

Me llevé una mano al estómago al sentir un retortijón desagradable.

- ______, ¿Te sientes mal de nuevo?

Killua me volteó a ver con preocupación. Me apresuré a negar con la cabeza y sonreírle para despreocupado.

- Estoy bien, sólo sentí una patadita

- ¡¿Qué tú qué?!

Tango Gon como yo nos echamos a reír, Killua tan sólo se cruzó de brazos con molestia mientras las mejillas se lo ponían rojas de la vergüenza.

- Tranquilo, estoy jugando

- Lo sé, pero no digas cosas así tan de repente, tonto

Killua se quejó otro poco mientras continuábamos avanzando por la calle, si seguíamos por este rumbo deberíamos llegar pronto...

- Ah, ¡Perros!

- Uh, sí, hay muchos perros callejeros...¡Ah! ¡Oigan!

Al instante comprendí el porqué de la exclamación de Gon cuando un grupo de al menos quince perros de diferentes tamaños se me echó encima.
Killua de inmediato fue a ayudarme pero cuando notó que yo me estaba riendo se detuvo.

- ¡Hola chicos! ¿Me extrañaron? Siguen siendo tan silenciosos como siempre, perdonenme por no tener comida para ustedes está vez

Recibí lamidas y suaves gimoteos por todas partes mientras cada uno de los perros movía la cola enérgicamente y pegaba uno que otro salto de emoción al verme.
Acaricié a todos los que pude y abracé a los más grandes mientras que a los más pequeños los cargué en brazos por momentos.

- Gon, Killua, acerquénse. Está bien, no son agresivos

Gon ya se encontraba acariciando a un pequeño grupo de los más curiosos, mientras que Killua dudó un poco pero finalmente se arrodilló a mi lado para acariciar a algunos.

Me alegra que estén todos bien...o al menos la gran mayoría. Incluso hay algunos que conocí de cachorros, crecieron bastante estos meses.

- Ah, vienen algunos más

- ¿Eh? ¿De verdad?

Levanté la vista al escuchar la voz de Gon, pero de inmediato tuve un mal presentimiento. Si que venían tres perros más, pero mas que venir corriendo parecían venir huyendo de algo.