ꜱᴀʏ ʏᴏᴜ ᴡᴏɴ'ᴛ ʟᴇᴛ ɢᴏ // Jᴏʜɴɴʏ Lᴀᴡʀᴇɴᴄᴇ.

19 𝓐𝓰𝓸𝓼𝓽𝓸 oo4

Desperté por el sonido de la guitarra y la voz de mi hermano cantando "Las mañanitas".

— Espera un momento. — salió de la habitación dejando a un lado la guitarra, entro con un pastel que decía "Feliz cumpleaños". — Pide un deseo.

Cerré los ojos, lo único que deseaba era tener a mis padres de perdido un solo día pero eso no se podía. Así que pedí que por favor mañana mi tía me diera la noticia de que es solo un error lo de la casa. Apagué las velas.

— ¿Por qué cancelaste la pequeña fiesta?. — me preguntó mientras le metía el dedo al pastel de chocolate.

La había cancelado por el dinero, porque si ese error se tardaba en demostrar que así es, tenemos que irnos unos días de está casa. Aún no le decía completamente nada a mí hermano, y estaba haciendo muy mal.

— Solamente iremos con mi tía, igual será un pastel y ya.

— Dime qué no irá el idiota del repartidor de pizzas. — le dí una sonrisa. — No lo soporto.

— No es tan malo como piensas, es un buen tipo. Después me llevará a un bar, llegaré en eso de las 2 de la mañana.

— No irás a un bar con ese tipo. — dijo el celoso. — Aún no me da buena espina.

— No lo has tratado, Aarón.

— Algo me dice que es un idiota, es mejor que no vayas.

— Ya quedé de celebrarlo con él.

— Puedes cancelarle.

— No, demasiado tarde.

— Nunca es demasiado tarde.

[...]

Mañana es mi cumpleaños y ya ni siquiera me interesa, es como cualquier día normal de mi vida. Los buenos cumpleaños los deje de tener desde que mi madre murió.

Baje de mi carro y entre a ese bar al que venía siempre o algunas veces.

[...]

— El pastel estaba muy rico. — comentó mi primo Óscar. — ¿Puedo comer otra rebanada, mamá?.

— No, es demasiada azúcar y no querrás dormir. Mañana tienes escuela. — se sentó nuevamente en su silla.

— Muchas gracias por la pequeña fiesta que has hecho, tía. — me abrazó. — Te agradezco mucho.

— Eres mi única sobrina mujer y haría cualquier cosa para que luzcas feliz. — sonreí. — Aarón me comentó que celebrarás con un muchacho más tarde, ¿es tu novio?.

— Se llama Ryan y no es mi novio, tampoco me interesa como novio. — reí.

— ¿Es guapo?.

— Diría que sí, pero no es mi tipo.

Recibí una llamada y era él, no le respondí y decidí abrir el chat en WhatsApp.

• Ryan •

Hola, estoy afuera
de tu casa.

Quiero presentarte a
mi tía, es en la misma
esquina de esa calle.

Okey, ahí estoy
en unos minutos.

— Le he dicho que viniera, te lo presentaré.