¿Quien diría que podría acabar así? Después de los innumerables esfuerzos por liberar a Hallownest de la terrible infección de The Radiance, que se encontrara con la buscadora de dioses era algo que no tenia planeado.
Ahora se encontraba encerrado e...
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Después de una agradable conversación nos encontrábamos justo en la entrada del palacio, la cual era custodiada por dos guardias que al vernos la bloquearon con sus armas. Antes de que pudiera hacer algo Grey se me había adelantado, se acercó a los guardias con una postura firme y les dijo algo en un tono que solo ellos pudieron escuchar.
No sé que fuera lo que les haya dicho, pero por un momento parecía que iban a dejarnos pasar, almenos hasta que me vieron. Los dos intercambiaron miradas antes de ver nuevamente al que estaba frente a ellos y dirigirle la palabra.
-Quien es él? Y mas te vale que no sea uno de esos insensatos del coliseo al que sacaste solo para "darle una ayuda" aquí en el palacio -el guardia escarabajo parecía molesto ¿tan malo era ayudar a alguien del coliseo? Es mejor que dejarlo morir en una pelea sin sentido, aunque no soy quien para decirlo.
-Oh vamos chicos ¿de verdad creen que hago eso todo el tiempo? Esta vez no es un gladiador -no estoy muy seguro de que estés en lo correcto- es alguien que el rey me envió a buscar y del que puede se hable luego, aunque hablando sobre su majestad debo tener una seria charla con él, de preferencia... ahora...
Pude notar como su actitud amigable desaparecía por completo con esa última palabra, mostrando una actitud fría y amenazadora junto a una profunda mirada vacía. Incluso a mí me incomodaba y eso que soy su hermano, pero peor estaban los guardias quienes eran los vistos fijamente por Grey, el cual esperaba a que se apartaran de su camino.
-E-entendido señor, el rey s-se encuentra en el comedor tomando su descanso habitual de la tarde -dijo el tembloroso guardia cucaracha, haciendo a un lado su arma al mismo tiempo que su compañero, evitando ver a Grey.
-En serio? Muchas gracias, que tengan un buen día *vuelve a su actitud amistosa* -con eso dicho dio una leve reverencia y se adentró al palacio, a lo cual le seguí de cerca.
Para ser sincero ahora me aterraba un poco la idea de enojarlo, por lo que no le dirigí palabra en todo el recorrido hasta el lugar que había mencionado aquel guardia. Grey notó esto e intentó calmarme, trató de mostrarse más sereno y detuvo su caminar para hablar de mejor manera conmigo.
-Hey, disculpa si te asuste antes ¿ok? Es solo que realmente necesito hablar con nuestro hermano, hay detalles que él sabe bien que no debe olvidar, menos el detalle de que no me... agradan los sustos
-Hmm... comprendo, pero no entiendo ¿a que te refieres con eso de los sustos?
-Te lo explicaré luego, por ahora sigamos antes de que cierta pequeña de la que hablamos antes te vea usando esa capa gastada
Con eso dicho seguimos nuestro camino, notaba como las miradas de curiosidad de los sirvientes que iban y venían por cada pasillo se dirigían a nosotros, pero no le quise tomar importancia. Mientras caminábamos veía a detalle lo que había en el castillo, las pinturas, las plantas, todas las decoraciones. Incluso veía las cierras que pasaban por momentos, supongo que algunas cosas nunca cambian.
