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Mis manos están sudando demasiado, mis dedos rasguñan levemente mi blanquecino uniforme. En mi mano derecha llevo el casco del uniforme creo que dijo el profesor que se llamaba Careta. Mis pies no paran de golpear el suelo por el nerviosismo y mi cara seguramente está de tono pálido. Es que yo ni sé cómo me metí en esto, sé que quizá como dicen los profesores el practicar este deporte me levante la nota, pero yo no sé cómo se hace... Nunca en mi vida lo he hecho. Yo no practico deporte. Ni mucho menos este.

El profesor sigue hablando y yo no lo estoy escuchando, si me pregunta algo saldré jalado en educación física... ¿Pueden creerlo?

Trato de tener mi mente clara y rápidamente vienen a mí los recuerdos de ese chico de la capucha, a igual del lindo chico que dijo que me ayudaría...

—¡Joven Kim! — gritó de la nada el profesor

¡Diablos! Justo me vio, mis ojos temblaron al mirarlo. Agaché mi cabeza por vergüenza, todos los alumnos ponían su atención en mi ¡Oh dios!

— Si desea puede compartirnos lo que piensa...Claro que sea apto para un salón de alumnos... ¿Eh Joven Kim?

— Y-yo lo si-siento mucho profesor — pedí al realizar una leve reverencia

— Bueno, bueno... A ver venga hacia aquí por favor

Ah, todo lo que me pasa. A pasos lentos y temblorosos evitando que me caiga de un lado al otro, caminé hacia el profesor como me pidió. Este uniforme enterizo me quedaba tan apretado, debí escoger una talla más grande. No podía ni caminar, se apegaba tanto a mí que se notaba todo mi cuerpo. Sé que soy más o menos delgado, pero...lamentablemente atrás no hay nada plano y no se imaginan como están mis amigos allá abajo.

El profesor sonreía cuando me miraba acercarme, no creo que sea una amable. Conservando aún esa sonrisa sacó algo parecido a una espada plateada de su espalda. ¿Qué? Y ahora qué piensa hacer con eso...

Todos los alumnos se empezaron a acercar, aclaro que no me gusta ser el centro de atención. Detrás de mi escucho pequeñas risillas y susurros que seguramente traen consigo insultos hacia mi persona. Sinceramente no sé en qué les beneficia eso.

— Como puede ver, este objeto — habló indicando la espada — Espada, Florete y sable. Son algunos de sus tipos. En esta clase introductoria utilizaremos el Florete. ¿Me oyó bien joven Kim?

¿Por qué ahora todo es en contra mía? ¿Qué hice? ... solo asentí para no quedar mal con el profesor — Si, profesor

— Mm... Alumno, si usted — Indicó el profesor a uno de los chicos del fondo — Acérquese por favor, tome un florete y colóquese su careta.

—Claro Profe — respondió ese chico castaño de sonrisa socarrona. Se colocó sus implementos aun conservando esa sonrisa canchera y antes de colocarse aquella máscara me miró sonriendo en el acto.

El profesor me dio el florete y la careta, para así colocármela. Los demás dieron un espacio. Estábamos uno frente al otro, mi mano sudaba sosteniendo esta espada. Aún no me había colocado la careta, mi mirada nerviosa iba del chico al profesor.

—Aquí sus compañeros nos darán un ejemplo de la clase, observen bien que es lo que se debe hacer y lo que no — Añadió el profesor — lo que quiero ver es su instinto es decir su reacción.

Ash no puede ser, yo nunca eh practicado... ni me han enseñado

— Vamos Joven Kim no se acobarde — Me dijo el profesor al tocar mi hombro, yo instintivamente volteé en su dirección. Dando la espalda al chico contrincante — Busque en su interior un espíritu guerrero, todos tienen uno.

❥𝓒𝓸𝓷𝓮𝓬𝓽𝓪𝓭𝓸𝓼 ❦  •Ⓣⓐⓔⓚⓞⓞⓚ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora