Solo importamos tú y yo {Lumity}

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Cuando regresamos al castillo ya eran las 6:30 de la tarde ya se estaba ocultando el sol y en la fábrica ya no se miraban casi nada, entramos al castillo y vimos a mi madre platicando con Gloria un poco preocupadas yo no entendía porque y le di mi abrigo Augusto.

_Qué pasa madre porque estás preocupada no has cenado todavía.

_No es eso linda lo que pasa es que tu hermana no ha regresado todo el día se la a pasa en la fábrica ni siquiera vino a almorzar.

_No puede ser

Augusto me miró preocupado le dije a mi madre que iba a ir a buscarla me dijo que también iba a ir, yo le dije que no, que se quedara mejor aquí en ese momento habló Gloria y dijo que me iba a acompañar no tuve más remedio que decirle que sí y como era obvio Augusto también fue conmigo.

Caminamos unos metros hasta llegar a la fábrica, donde se podían ver trabajadores pero no muchos ya casi todos se habían ido a sus hogares, caminábamos con cuidado porque avían muchas partes de máquinas en el suelo oxidadas, seguimos caminando hasta que por fin encontramos a Amity, estaba parada viendo el paisaje que le otorgaba la naturaleza le grité y ella volteó a verme enojada esa paz se había ido de su rostro, bajó del lugar donde estaba y caminó en dirección a nosotros.

_Qué están haciendo aquí es muy peligroso para ustedes regresen al castillo.

_Regresa tú me contó mi madre que no has almorzado qué piensas morirte.

_Y a ti qué te importa lo que haga o no ahora ya tienes a tu parejita porque mejor no te metes en su vida y dejas de estar en la mía.

Augusto quiso decir algo pero Amity lo callo con una palabra muy vulgar él no tuvo más remedio que quedarse callado porque él no estaba acostumbrado a insultar a las mujeres.

_Por favor amity recapacita, tu madre está angustiada en el castillo ve a comer y hablamos con calma en un lugar más cómodo.

habló la señora Gloria un poco preocupada por ella después de acusarla de matar a su marido, sé que ya había pasado unos días pero ese sentimiento de decepción no se iba, Amity la agarró de su antebrazo y la jaló y le dijo que no estuviera metiendose en conversaciones que no le importa Augusto fue ayudar a su madre pero todo salió peor porque empujó a Amity, haciendo qué Amity empujara a Gloria ella se tropezó con sus tacones y se cayó en un gigante hoyo donde los trabajadores tiraban los repuestos viejos que estaba a su izquierda.

Todos vimos esa escena horrorosa la señora cayó en el hoyo rodando hasta que un metal puntiagudo se introdujo en su parte abdominal traspasando su cuerpo y chorreando sangre en todo el metal oxidado y en las hojas de otoño que permanecian en el suelo.

Augusto gritó el nombre de su madre y salió corriendo en dirección a ella yo no pude moverme sólo sentí como mi hermana me abrazaba yo la abracé también para llorar en sus brazos yo era muy sensible para ver esas escenas y no me di cuenta que mi hermana no estaba llorando ni estaba triste lo único que mostrar su rostro era felicidad.

Augusto estaba con su hermano llorando los dos destrozado sólo eran los únicos que quedaban en este Castillo del apellido Akerman, mi madre quiso llamar a la policía pero mi hermana la detuvo porque le dijo que el oficial los estaba vigilando y si ellos otra vez los llamaban los iban a arrestar a todos por complicidad y por ocultar el asesino verdadero.

Los Akerman, lo único que hicieron es llorar y decidir que ellos mismos y van a enterrar el cuerpo de su madre, Augusto no le dijo nada a Amity porque él piensa que fue su culpa que su madre murió si no hubiera empujado a Amity su madre estuviera viva en estos momentos.

Yo fui con él y le dí consuelo él me abrazó y sentía como mi hermana me miraba con ojos de asesina pero no me importó ella sabe que yo lo amo y no importa que pase yo siempre estaré para el.

Dos días después la estaban enterrando a unos metros de las máquinas y del Castillo sólo estábamos nosotros nada más porque ni nosotros ni ellos tenían mas familiares, cuando terminó el entierro mi hermana se fue a su cuarto a darse un baño y yo fui con Augusto a la ventana donde su madre siempre se quedaba admirar el pueblo desde el castillo.

_No te preocupes mi amor, esto no fue tu culpa sólo fue un accidente sabes que mi hermana siente mucho tu pérdida, tienes que sonreírle a la vida tu madre no está pero yo estoy aquí para ayudarte a olvidar el dolor.

_Muchas gracias Luz, te quiero mucho, no todos estuvieran como tú apoyándome en estos momentos.

_No te preocupes yo nunca te dejaré sólo

_No sé pero la culpa no me deja, si no hubiera jalado a tu hermana mi madre no estuviera muerta pero mi estupidez me tapó los ojos y actúe por mi cuenta sin pensar y mira las consecuencias dejé a mi hermano y a mi huérfanos, y ahora cómo vamos a sobrevivir nosotros no podemos mantener nuestras máquinas somos muy jóvenes para saber cómo mandar y cómo usarlas.

_No te preocupes mi amor mientras resuelven eso podemos darte alojo el tiempo que tú quieras en nuestro hogar.

_Creo que eso lo decidirá mi hermano pero si nos vamos te visitaré todos los días te lo prometo.

Amity se encontraba sentada enfrente de su tocador mientras se secaba su cabello después de darse un relajante baño y de ponerse una ropa cómoda se empezó a peinar su corto cabello castaño lacio y suave.

Pero no duró mucho porque cuando miro en el espejo vio una mujer de vestido negro con velo en la cara que no dejaba ver su rostro, Amity cuando la vio rodó los ojos y se sentó a modo de quedar en frente de ella la mujer se acercó y se hincó enfrente de ella se quitó el velo de la cara y acercó sus dos manos para posicionarlas en sus cachetes.

_Ves que no estaba equivocada Amity, tarde o temprano ibas caer en la locura igual como mis hijos ya vas matando a dos personas sólo por un amor imposible.

_Sabes que los Akerman, sólo eran piedras en el camino el que tengo que matar es Augusto, es el imbécil que ha robado el corazón de mi hermana y ese corazón sólo tengo que tenerlo yo.

_Al menos no disimulas que mataste al señor Akerman.

_Nadie sospecha de mí y la señora Akerman no estaba en mis planes matarla todavía pero ahora me acaba de facilitar mis planes, ahora que los Ackerman están solos tendrán que regresar otra vez a su Castillo arreglar todo y voy a tener tiempo para recapacitar a mi hermana y que las dos estemos juntas.

_Si sigues pensando así terminarás como yo.

_Ahora no me vengas con tus malditas adivinanzas, ya no soy una niña chiquita, sé que tu historia y la mía son iguales lo único que con partes diferentes y sé que terminare igual como tú... pero al menos quiero cumplir mi deseo de que mi hermana y yo seamos pareja y que no me vea como hermana sino como una mujer qué le puede dar amor de mil maneras.

Amelia me miró pero no había ni una expresión en su rostro se paró otra vez y se puso el velo camino hacia una pared y sólo me miró y me dijo “que tengas buena suerte mi niña disfruta estos días que te quedan de vida porque cuando mueras sólo estarás con fantasmas atormentandote toda tu vida de muerta”