Shingeki No Kyojin "Armin x Annie"

''Evidencias que se recoletan sin querer'' Parte 1

La luz calidad del sol ingresaba por medio de la tela que conformaba la carpa. Todo el escenario de su alrededor se veía vivo y brillante, una típica mañana de post - invierno.

Armin... despierta, comentó Annie, quien se encontraba sentada arreglando su cabello.

¿Eh...? ¿Annie? ¿Qué hora es? Preguntó. Uaaaaah, bostezó tapándose la boca.

No lo sé, pero debemos levantarnos ahora, dijo en un tono serio.

Esta bien, contestó Mientras buscaba su chaqueta entremedia del desorden que había. Mira, encontré tu chaqueta, expresó mientras se la entregaba.

Gracias, respondió, colocándosela de inmediato.

¡Fórmense reclutas! Ordenaba el instructor, quien se encontraba montado sobre su caballo. El día de hoy, seguiremos avanzando por la montaña Ruish hasta llegar al otro cuartel que se encuentra en la zona más alta, les aviso altiro cadetes, en ese lugar, la nieve abunda por todos lados ¡¿Entendieron?!

¡Si señor! Respondían.

En esta ocasión, no habrá trote, solo caminaremos 10 km cargando todo nuestro equipamiento.

¡10 km! Eso es mucho ¿Podremos llegar? ¿Acaso a esa altura también hay titanes? ¿Llegaremos vivos? Comentaban susurrando los reclutas entre ellos

Ahora que ya tienen todo guardado, comencemos a caminar ¡En marcha reclutas! Ordenaba el instructor mientras daba unos pequeños golpes en las costillas del animal.

Annie, antes de que cayera el muro María ¿Dónde vivías? Preguntó Armin, quien se encontraba mirando todo el bello paisaje de invierno que los rodeaba.

Ella caminaba seria, sin ninguna intención de querer interactuar con alguien, aun así, respondió. Vivía en el sur del muro María.

Ahh.. entiendo ¿Y que te motivo por meterte al ejercito?

Mi padre, respondió sin agregar nada más.

Ya veo, yo vivía en el distrito de Shiganshina, ubicada en el muro María. Comentó, mientras su rostro demostró un sentimiento de tristeza, lo cual, Annie notó. Yo vi como el titan Colosal apareció sobre el muro y en un instante, vi volar la puerta por sobre los cielos a gran velocidad, solo tomó minutos para que se llenara de titanes, agregó.

¿Perdiste algún familiar? Preguntó, dejando de mirar el centro para enfocarse en él.

Solo vivía con mi abuelo, pero él no murió en la invasión, a el lo mandaron a morir por una causa suicida justificada como la recuperación del muro María.

Algo escuche sobre eso.

Si, me lo puedo imaginar, comentó. Más de 250 mil personas pertenecientes a la ya caída muro María, marcharon en fila para recuperar lo suyo, solo 25 mil volvieron.

Una masacre aparentemente, lo siento por tu abuelo, lo siento mucho.

Tranquila Annie, no fue tu culpa que el muro haya caído como para disculparte por eso.

El pelo de Annie tapó sus ojos, ella no mencionó ninguna palabra, se mantuvo firme en su mirada, observando cada detalle que aparecía en su camino.

¡Reclutas! Gritaba el instructor mientras interrumpía el ambiente, debemos acelerar mas el paso o no llegaremos, expresó. ¡Marchen reclutas! Ordenó.

Todos los reclutas formados, emprendieron el camino mas largo de su vida, sus quejidos combinados con las pisadas que daban se podían escuchar a un par de metros a la redonda, el sudor que sobre salía de cada uno era como una pequeña cascada que brotaba de sus poros, el esfuerzo físico, fue lo peor de todo. Mientras transcurrían las horas, el ambiente iba cambiando de a poco, los colores brillantes y llamativos, iban desapareciendo por cada minuto recorrido, la temperatura ya se hacia notar cada vez más, generando un sobre esfuerzo mayor.